Frente al Bayern, el París SG espera disfrutar de la magia de Neymar
Expulsado en el último partido de la Ligue 1, el ‘mago’ Neymar debe buscar todo tipo de sortilegios para ayudar al París Saint-Germain a superar al Bayern Múnich en los cuartos de final de la Liga de Campeones. De lo contrario los hinchas parisinos podrían considerarle culpable de una maldición.
Habituado a ser protagonista en las redes sociales por sus habilidades con el balón, ‘Ney’ mostró el pasado fin de semana otra cara de su personalidad.
Después de encararse con el defensa portugués del Lille Tiago Djalo en una acción que costó la expulsión a ambos jugadores, Neymar siguió provocando a su rival cuando ambos se retiraban y el altercado continuó en el túnel de vestuarios, donde tuvo que intervenir la seguridad para separarles.
“En el túnel, me dijo cositas que no me gustan e incluso me tiró una venda a la cara. Neymar debe mostrar más respeto”, reclamó Djalo en declaraciones al diario portugués A Bola.
Tras este incidente, Neymar publicó en Instagram unas líneas del Evangelio según San Juan. Su entrenador, el argentino Mauricio Pochettino, tuvo más dificultades para explicar el comportamiento de su estrella.
Gestión de la emoción
“La gestión de la emoción es parte de la vida. La gestión de grandes cosas es atípica con respecto a los últimos años. Todo ha cambiado”, explicó el técnico sin nombrar específicamente al brasileño.
El caso Neymar debería ser analizado el miércoles por la comisión de disciplina de la LFP, cuando el ’10’ se encuentre sobre el césped del Allianz Arena en lo que se aventura como el partido más importante de la temporada para él, al menos hasta el momento.
En esta temporada, sólo hace falta tomar la temperatura de ‘Ney’ para conocer el estado de forma del PSG.
En septiembre, su expulsión contra el Marsella en un partido marcado por la acusación de racismo y homofobia lanzada por el brasileño contra el defensa español Álvaro González, fue la imagen del mal inicio de curso un inicio de curso completamente de un equipo que no tuvo pretemporada después de haber llegado a la final de la Champions, perdida precisamente contra el Bayern.
En el otoño boreal, Neymar ofreció un nivel excelente, sobre todo en la Liga de Campeones, contribuyendo brillantemente a la clasificación del PSG con seis goles, dos de ellos en Old Trafford para ganar al Manchester United (3-1).
Pero el rendimiento del brasileño decayó con el cambio de año y eso se ha reflejado en la irregularidad del PSG.
Las lesiones (en el tobillo en diciembre y en el aductor en febrero) le privaron de ritmo de competición. Desde septiembre se ha perdido más partidos (23) de los que ha disputado (20).
Tras dos meses de ausencia, Neymar regresó contra el Lille, rival directo en la pelea por el título, volvió a ser titular, pero su juego y su actitud defraudaron y el PSG acabó perdiendo (1-0).
¿Estará listo para el doble duelo frente al campeón germano? Físicamente ha podido ultimar su puesta a punto durante la tregua internacional de marzo ya que no tuvo que concentrarse con Brasil después del aplazamiento de los partidos de clasificación mundialista de la zona sudamericana.
“Tregua beneficiosa”
“La tregua internacional ha sido beneficiosa para él. Ha podido entrenarse dos semanas a un muy buen nivel”, declaró el viernes pasado su técnico Mauricio Pochettino sobre el brasileño.
En cuanto a su motivación, Neymar nunca ocultó su deseo de volver a ganar una Liga de Campeones, competición que conquistó en 2015 cuando jugaba en el Barcelona.
Estuvo cerca de lograrlo en agosto pasado, pero el PSG perdió 1-0 ante el Bayern en un partido en el que Neymar se fue apagando con el paso de los minutos.
“Lo intentamos todo”, admitió aquella noche el delantero, que acabó llorando.
Ahora, Neymar tendrá además que multiplicarse ante la ausencia del italiano Marco Verratti, habitual organizador del juego ofensivo parisino.
Mientras continúan las negociaciones para prolongar un contrato que acaba en 2022, Neymar necesita más que nunca de su magia para borrar las dudas que surgen por sus cambios de humor y las lesiones.