Suicidios aumentan y hay subregistro en Puebla
Liliana Tecpanecatl
La semana anterior, llegaron a los titulares noticiosos al menos tres casos de habitantes de la ciudad de Puebla, que intentaron quitarse la vida. El suicidio es un fenómeno que va en aumento e todo el mundo y el estado no es la excepción.
A nivel nacional, de acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), los fallecimientos por lesiones autoinfligidas son la cuarta causa de muerte en la población de 15 a 29 años.
En hombres se presenta como la tercera causa, mientras que para las mujeres es la quinta. Tan solo en el 2021 se observaron 8 mil 447 suicidios mil 224 más que en 2019, es decir, México presenta una tasa del 6.2 por cada 100 mil habitantes.
La mayoría de los casos son de varones de entre 18 y 29 años. En 2020, Puebla estaba ligeramente por debajo de esta cifra nacional con una tasa de 5.2; aun así cada día existen 1.5 suicidios reportados de manera oficial.
Sin embargo de acuerdo al doctor Quetzalcóatl Hernández Cervantes, autor del libro Diagnóstico de la mortalidad autoinfligida en el estado de Puebla: acciones para su atención, existe un subregistro que no se evidencia en las instituciones nacionales.
En el diagnóstico de su autoría, el experto encontró que, actualmente, puede haber de dos a cuatro suicidios al día en el estado de Puebla. Además, como dato importante, hay que resaltar que por cada suicidio consumado hay al menos 20 intentos no letales.
¿Cuál es la situación del suicidio en México? #DíaMundialParaLaPrevenciónDelSuicidio #INEGI https://t.co/4OTM8BMRwc pic.twitter.com/rriMdFpg0C
— INEGI INFORMA (@INEGI_INFORMA) September 11, 2020
Si bien el suicidio es considerado ya un problema de salud pública, no existen políticas gubernamentales concretas encaminadas a su prevención. Hay esfuerzos asilados, pero ninguna estrategia integral. El IMSS y la secretaría de Salud ofrecen líneas de atención psicológica.
La arquidiócesis de Puebla, también. En todos los casos, operan con horarios limitados y de lunes a viernes y no como un servicio diseñado para atender emergencias. Tampoco existen campañas de difusión al respecto.
En cuanto a los factores de riesgo, destacan: Haber realizado un intento suicida previo, padecer una enfermedad mental, tener una enfermedad crónica sobre todo si provoca dolor y el consumo de sustancias nocivas, incluyendo alcohol.
También se considera un riesgo, pertenecer a grupos de alta vulnerabilidad, LGBT, VIH, antecedentes de abuso, menores de edad solos, entre otros.
Por otra parte, se han identificado acciones protectoras: contar con relaciones interpersonales con vínculos afectivos sólidos, arraigo a creencias religiosas o espirituales, tener un hogar, condiciones de seguridad general, buena alimentación y descanso apropiados.
Debido a que las ideas suicidas se presentan cada vez más en personas jóvenes, es muy importante desarrollar en los niños y adolescentes aptitudes socioemocionales para la vida, habilidades de afrontamiento de problemas y comunicación con las personas que pueden proporcionar ayuda cuando lo requieran.
Finalmente es importante destacar que está bien hablar del suicidio, ello NO provoca el acto como tal, más bien lo previene. Los suicidios pueden evitarse. Cualquier episodio de autolesión es un indicador de sufrimiento y requiere atención.