El Bayern de Múnich y el Real Madrid ofrecieron un ‘Clásico Europeo’ a la altura de las expectativas. Igualaron (2-2) este martes en el Allianz Arena en el partido de ida de las semifinales de la UEFA Champions League, con un doblete de Vinicius Jr. para los ‘merengues’.
En un duelo al límite, con tramos del partido para ambos equipos, los tantos del brasileño al minuto 24′ y otro al 83′ de penal, fueron contrarrestados por los de Leroy Sané al minuto 53′ y Harry Kane al 57′, también de penal, que parecía que los ‘bavaros’ se llevarían la victoria en casa.
Con este resultado, el Madrid extendió su racha ‘sin derrotas’ en el Allianz Arena a ‘cuatro partidos consecutivos’. En las ‘semis’ de 2014, logró una histórica victoria por (4-0) que marcó el inicio de una nueva era dorada, rompiendo la racha de ‘nunca haber ganado en la capital bávara’.
Ahora, el próximo miércoles 08 de mayo, en el Santiago Bernabéu, deberán confirmar este empate para poder alcanzar la final del próximo sábado 01 de junio en Wembley, donde se enfrentarán al ganador del partido entre el Borussia Dortmund y el París Saint-Germain.
– Acoso inicial –
Con 75,000 espectadores en el Allianz Arena, el ambiente era vibrante, como ‘una caldera al rojo vivo’. Un impresionante tifo de la leyenda Franz Beckenbauer, excapitán y entrenador de la Selección Alemana y Campeón del Mundo en 1974 y 1990, decoraba uno de los sectores.
Desde el inicio, el Bayern de Múnich exhibió su superioridad y controló el juego ante un Real Madrid que luchaba por mantener la posesión y encadenar pases durante los primeros 15 minutos del partido. A pesar de tres oportunidades iniciales, Harry Kane y Leroy Sané no lograron capitalizarlas.
Especialmente dolorosa para los bávaros fue la primera, a los 42 segundos, con un Andriy Lunin milagroso al sacar con la pierna el remate a bocajarro de Sané. No se inmutaba ‘El Rey de Europa’, soportando con oficio el vendaval local, que se fue disipando sin recompensa.
– Obra de arte de Kroos –
A los 20 minutos, Toni Kroos tomó el control del partido, demostrando calma al sacar el balón desde su área, pero también ‘exhibiendo su habilidad al desarticular la defensa rival’ con un pase magistral a Vinicius Junior, quien convirtió sin problemas el primer gol.
El brasileño había atraído al surcoreano Kim Min-Jae hacia el centro del campo, simulando con el cuerpo antes de encontrarse solo frente a Manuel Neuer en el primer intento de los ‘merengues’. Kroos le señaló dónde enviar el balón con un gesto, y acertó.
Tras su gol, el Real Madrid dominó con un juego combinativo y sólido, manteniendo al Bayern controlado. En la segunda mitad, Kroos estuvo cerca de completar una noche perfecta, pero Manuel Neuer despejó su remate tras un pase de Jude Bellingham.
– Sané, arranque de rabia –
Luego llegó el segundo impulso del Bayern de Múnich, esta vez aprovechado al máximo. Primero, Leroy Sané, en un despliegue de furia desde la derecha, concluyó con un potente disparo con la zurda.
Seguido, desde la otra banda, se produjo la jugada del penal señalado a Jamal Musiala por un contacto con Lucas Vázquez. Harry Kane engañó a Andriy Lunin para poner el marcador (2-1).
Con el impulso del equipo local y la presión creciente del Real Madrid, el partido se convirtió en un frenesí de ida y vuelta, con Vinicius mostrando falta de claridad tras un error defensivo de los ‘bávaros’ al minuto 64′ y luego enfrentándose a Manuel Neuer en el 79′.
Con 15 minutos por jugar, Ancelotti aumentó la intensidad del juego del Madrid al hacer ingresar a Eduardo Camavinga, Luka Modric y Brahim Díaz.
Entonces, al 82′, llegó el penal a favor del Madrid tras una falta de Min-Jae sobre Rodrygo, quien había estado ‘prácticamente desaparecido’ hasta ese momento. Vinicius, su compañero, no desaprovechó la oportunidad y marcó con precisión para igualar el marcador (2-2).
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