¿Te falta vitamina B?, bébete una bien fría
David Becerra
Agua, malta, levadura y lúpulo; 4 ingredientes que en cantidades perfectas crean una bebida ancestral, ingerida por generaciones en diversas culturas.
Si bien se ha asociado a la cerveza, una bebida embriagante, a los excesos y malos desenlaces, lo cierto es que por su composición puede otorgar ciertos nutrientes y beneficios en cantidades moderadas.
Algunos estudios han arrojado que contiene cantidades de ácido fólico y “vitamina B” así como un ligero porcentaje de carbohidratos; consumirla moderadamente también proporciona una notable mejora en el sistema inmune que podría mejorar la respuesta ante enfermedades infecciosas.
Contiene agentes antioxidantes que podrían retrasar levemente el envejecimiento de órganos vitales.
La cerveza contiene cantidades de silicio, lo cual ha sido asociado al combate de enfermedades neurodegenerativas como lo son el Alzheimer, otras fuentes de silicio son: el café, los plátanos, el agua, las judías verdes y las espinacas.
Ser responsable al ingerir esta bebida puede ser beneficioso, y como en cada aspecto de la vida, todo en exceso es malo.