¿Quién inventó el café descafeinado?
Redacción
La historia del café descafeinado es un fascinante recorrido que se entrelaza con la evolución de la ciencia y las demandas del mercado.
Aunque hoy en día es una opción popular para quienes buscan disfrutar del sabor del café sin la cafeína, sus orígenes se remontan a principios del siglo XX.
El proceso de descafeinación fue desarrollado en 1903 por el químico alemán Ludwig Roselius, quien accidentalmente descubrió que los granos de café sumergidos en agua salada perdían su contenido de cafeína sin afectar significativamente su sabor.
Este hallazgo llevó a Roselius a patentar el primer método de descafeinación, que utilizaba benceno para extraer la cafeína de los granos de café. Sin embargo, debido a preocupaciones sobre la toxicidad del benceno, este método fue abandonado.
Con el tiempo, se desarrollaron técnicas más seguras y eficientes para descafeinar el café. En la década de 1930, se introdujo el método suizo del agua, que utiliza agua caliente y filtros de carbón activado para remover la cafeína.
En los años 70, el método del dióxido de carbono supercrítico se convirtió en uno de los más utilizados, aprovechando la capacidad del CO2 en estado supercrítico para extraer la cafeína de los granos de café.
Hoy en día, la descafeinación se realiza principalmente mediante tres métodos: el método suizo del agua, el método del CO2 supercrítico y el método del acetato de etilo. Cada uno de estos procesos asegura que los granos de café mantengan su sabor y aroma característicos mientras se elimina gran parte de la cafeína.
El café descafeinado ha evolucionado para satisfacer la creciente demanda de los consumidores que buscan disfrutar del café sin los efectos estimulantes de la cafeína. Ya sea por razones de salud o preferencia personal, el café descafeinado sigue siendo una opción popular y apreciada en todo el mundo.