El “Chicharito” Hernández acaba de dar una patada tan fuerte… que se la dio a su propia reputación… otra vez. El exjugador del Manchester y astro caído del Real Madrid se aventó un discurso en Instagram digno de un panfleto de los años 50: pidió que las mujeres vuelvan al hogar a “limpiar, cuidar y dejarse liderar por un hombre”. ¿En serio, bro?
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Y claro, le llovió con todo. Fátima Molina lo llamó “un hombre negado a deconstruirse”, mientras Adriana Louvier pensó que se había metido a una secta. Bárbara de Regil no se aguantó la risa y Jass Reyes dijo que el video parecía “película de terror”.
Pero la que lo reventó fue Tania Rincón, quien no sólo lo trolleó en vivo, sino que advirtió que comentarios así “empoderan a otros machitos”. Andrea Legarreta también se sumó: “Mejor que se quede con sus goles”.
¿Lo peor? Martha Higareda, la reina de los guiones “basados en hechos reales”, le dio like. Ay, Martha…
Chicharito quiso jugar de coach espiritual y terminó con tarjeta roja social. Consejo: la próxima vez, mejor quédate hablando de fútbol, no de feminidad.
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