Cumbre en Alaska entre Trump y Putin por guerra en Ucrania

Estados Unidos y Rusia se preparan para una inusual cumbre este viernes en Alaska, territorio cargado de simbolismo histórico como antiguo punto estratégico durante la Guerra Fría. Será el primer encuentro en cuatro años entre el presidente ruso, Vladímir Putin, y el presidente estadounidense, Donald Trump, con la guerra en Ucrania como tema central.

Putin no visitaba suelo estadounidense desde 2015, cuando asistió a la Asamblea General de la ONU. Su regreso se produce pese a la orden de arresto emitida por la Corte Penal Internacional en 2023, que Washington no está obligado a ejecutar al no ser miembro del tribunal. La cita será privada y sin la presencia del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, pese a que inicialmente se sugirió su participación.

El Kremlin ha reiterado que no se reunirá con Zelenski hasta que existan las “condiciones necesarias” para un acuerdo de paz, postura que inquieta a Kiev y a sus aliados. Funcionarios ucranianos advierten que excluirlos de las negociaciones pondría en riesgo cualquier posibilidad de solución duradera.

Mientras Trump ha manifestado impaciencia ante la negativa de Moscú a detener sus ataques, Ucrania ha dicho que aceptaría un alto al fuego como primer paso. Sin embargo, Rusia exige condiciones que Kiev considera inaceptables, entre ellas: retirada de tropas ucranianas de los territorios ocupados desde 2022, suspensión de la movilización militar y fin de los envíos de armas occidentales.

Putin busca además que Ucrania renuncie a unirse a la OTAN, reduzca sus fuerzas armadas, reconozca el ruso como idioma oficial y ceda Crimea junto con las regiones anexadas, incluso aquellas que Moscú no controla por completo. Zelenski ha respondido que no entregará “ni un metro” de territorio.

La cumbre en Alaska podría abrir la puerta a nuevas negociaciones o, por el contrario, confirmar que las posturas de Moscú, Kiev y Washington siguen demasiado alejadas para poner fin a más de tres años y medio de conflicto.