
Tribuna Deportes
En una semifinal cargada de intensidad y ritmo ofensivo, los Borregos Monterrey derrotaron 52–34 a los Borregos Puebla, en un duelo donde la hegemonía regiomontana se hizo evidente desde la primera mitad y se mantuvo firme hasta el silbato final.
El encuentro comenzó con ambos equipos estudiándose, pero fue Monterrey quien logró romper el equilibrio. En los últimos cinco minutos del primer cuarto, los regios encontraron la fórmula para golpear primero y tomar la delantera, marcando el tono del resto del partido. Su ataque terrestre y aéreo comenzó a fluir con precisión, obligando a Puebla a ajustar contrarreloj.
Fue hasta el minuto nueve del segundo cuarto cuando Borregos Puebla logró finalmente meterse al marcador con sus primeros siete puntos, encendiendo a su banca y devolviendo algo de tensión al encuentro. Sin embargo, Monterrey respondió con la calma de un equipo acostumbrado a escenarios de alta exigencia, manteniendo siempre una distancia cómoda.
Ya en el tercer cuarto, la autoridad de Borregos Monterrey se hacía imposible de ignorar. Su ofensiva continuó castigando, mientras su defensiva aprovechaba cada error poblano para frenar intentos de remontada. Puebla, pese a mostrar carácter y sumar puntos en momentos clave, nunca logró acercarse lo suficiente para comprometer la ventaja rival.
El marcador final, 52–34, reflejó tanto la explosividad ofensiva del conjunto regiomontano como el espíritu combativo de Puebla, que vendió cara su derrota. Monterrey, por su parte, confirmó por qué es uno de los programas más sólidos del país y avanzó con autoridad a la gran final de la ONEFA, donde buscará cerrar la temporada con un título más para su prestigiosa historia.









