Cuenta la BUAP con proyecto para medir partículas contaminantes

Puebla, Pue.- Durante este fin de semana, alumnos de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), en colaboración con la Universidad de Tabasco, se dieron a la tarea de colocar una especie de sensores que se encargan de monitorear las partículas suspendidas, un proyecto denominado “Ciencia Ciudadana”.

En entrevista, Marco Antonio Mora, profesor investigador de la facultad de Ciencias Químicas y del cuerpo académico de 323 de la BUAP, explicó que este proyecto tiene el objetivo de medir la cantidad de partículas en el aire que inhalan los peatones.

#BUAP implementa proyecto para medir partículas contaminantes informó, Marco Antonio Mora, profesor e investigador de la escuela de Ciencias Químicas de la máxima casa de estudios. @NoticiasTribuna @TribunaVigila pic.twitter.com/rH8IYRlMC3

— Aby González (@AbiyouGonzalez) July 21, 2024

Este proyecto se encuentra ubicado en la calle 16 de Septiembre esquina con 11 Poniente, donde el académico indicó que las partículas suspendidas son materiales de tamaños microscópicos que se encuentran en la atmósfera y son consideradas contaminantes.

Lo que estamos haciendo hoy es una pequeña parte del proyecto para medir material particulado que puede contener desde ceniza volcánica, polen, metales pesados, arsénico, muchas cosas y el problema es que son pequeñitas, y entonces la podemos inhalar, las partículas gruesas las retemos aquí en la mucosa”.

Indicó que este experimento durará dos semanas; sin embargo, indicó que es el inicio para comunicarse con la ciudadanía y generar resultados que se darán a conocer a finales de año, en el mes de noviembre.

Estas partículas pueden provocar daños en la salud ya que la exposición prolongada a éstas puede generar enfermedades respiratorias y cardiovasculares afectando principalmente a niños y adultos mayores.

Daños al medio ambiente:

• Contribuye a la contaminación atmosférica
• Afectaciones a la fotosíntesis
• Lluvia ácida
• Cambios físicos y químicos del suelo y agua
• Afectaciones a la visibilidad

Además, el académico, explicó que los sensores funcionan a base de un láser y a través de una cavidad, un ventilador succiona simulando la cantidad de aire que un humano respira.

Ese aire que entra, pasa por un láser se llama ‘fenómenos de dispersión de la luz’ y esa dispersión nos ayuda a contar el número de partículas que hay en el ambiente”.

Este proyecto cuenta con 20 sensores que se encuentran a dos alturas: la estatura promedio de un adulto y otra, la altura de los niños. Además, el objetivo es poder llevarlo a los hogares de los poblanos para medir el aire en diferentes zonas.

Esta idea se baso principalmente en el proyecto “Delfín” que lo inició una universidad de Nayarit que a lo largo del tiempo se fue expandiendo tanto nivel nacional como internacional.

Finalmente indicaron que este proyecto puede ayudar en un futuro, debido al cambio climático, ya que ninguna institución lo toma de manera responsable.

A la ciudadanía que quiera participar en este proyecto necesita contar con wifi y no tener cerca de su hogar fuentes de emisión.