De visita Vladimir Putin en Moscú; mantendrá conversaciones con el líder de Siria
Redacción Tribuna
El presidente ruso, Vladimir Putin, sostendrá conversaciones con el líder de Siria, Bashar al-Assad, en Moscú el miércoles, dijo el Kremlin, mientras las relaciones entre los estados de Medio Oriente se realinean.
Rusia ha sido uno de los pocos aliados de Siria durante sus años de guerra y aislamiento político.
“Se discutirán los temas de actualidad del mayor desarrollo de la cooperación ruso-siria en las esferas política, comercial, económica y humanitaria, así como las perspectivas de una solución integral de la situación en Siria y sus alrededores”, dijo el Kremlin en un comunicado el martes.
La oficina de Assad dijo que había llegado a Moscú para una visita oficial durante la cual se reuniría con Putin.
En un comunicado, dijo que el presidente sirio había sido recibido a su llegada por el representante especial de Putin, Mikhail Bogdanov, y el embajador ruso en Damasco, Alexander Yefimov.
Assad estuvo acompañado por una “gran delegación ministerial“, dijo el comunicado de la presidencia siria.
Damasco es un aliado incondicional de Moscú, que intervino en el conflicto sirio en 2015 lanzando ataques aéreos para apoyar a las fuerzas gubernamentales en apuros.
Con ese apoyo, así como de Irán, Damasco recuperó gran parte del territorio que había perdido en las primeras etapas de la guerra.
La guerra civil siria ha matado a alrededor de medio millón de personas y ha desplazado a millones más desde que comenzó en 2011 con la brutal represión de las protestas antigubernamentales.
El gobierno de Assad ha estado políticamente aislado en la región desde el comienzo del conflicto, pero ha estado recibiendo llamadas y ayuda de los líderes árabes después del terremoto del 6 de febrero que mató a decenas de miles de personas en Turquía y Siria.
Los analistas dicen que podría aprovechar este impulso para reforzar el apoyo regional.
Después del terremoto, Putin ofreció ayuda rusa a Turquía y Siria.
La guerra de Siria provocó relaciones tensas entre Damasco y Ankara, que durante mucho tiempo ha apoyado a los grupos rebeldes que se oponen a Assad.
Pero los analistas han dicho que Moscú está tratando de cerrar la brecha entre sus dos aliados, unidos por un “enemigo” común: las fuerzas kurdas en el norte de Siria, descritas como “terroristas” por Ankara y respaldadas por Washington.
En diciembre, los ministros de defensa de Rusia, Turquía y Siria se reunieron en Moscú para las primeras conversaciones de este tipo desde que comenzó la guerra en Siria.
Assad había dicho en enero que un acercamiento con Turquía mediado por Rusia debería tener como objetivo “el fin de la ocupación” por parte de Ankara de partes de Siria.
Los informes de los medios el martes dijeron que los lazos entre Damasco y Ankara estarían entre los temas para Putin y Assad.
Su reunión también sigue al sorpresivo anuncio el viernes de una restauración de las relaciones diplomáticas negociada por China entre los principales rivales de Medio Oriente, Arabia Saudita e Irán.
Assad no ha visitado Moscú desde septiembre de 2021, cuando también se reunió con Putin.