
Deshielo en las relaciones: primera llamada entre Trump y Carney
Redacción Tribuna
En su primera llamada oficial, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el nuevo primer ministro de Canadá, Mark Carney, discutieron el viernes sobre comercio y diplomacia, lo que indica un posible deshielo en las relaciones después de semanas de crecientes tensiones por los aranceles y las controvertidas declaraciones de Trump sobre la anexión.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que tuvo una primera llamada “extremadamente productiva“ el viernes con el nuevo primer ministro de Canadá, Mark Carney, después de las crecientes tensiones por los aranceles y los repetidos llamados de Trump a anexar a su vecino del norte.
Trump agregó que ambos planeaban reunirse poco después de las elecciones generales de Canadá del 28 de abril, en las que Carney, quien asumió el cargo hace dos semanas, hizo del enfrentamiento al presidente estadounidense el foco de su campaña.
“Acabo de terminar de hablar con el primer ministro de Canadá, Mark Carney. Fue una llamada sumamente productiva; coincidimos en muchas cosas”, dijo Trump en su red social Truth.
Trump dijo que se reunirían “inmediatamente después de las próximas elecciones en Canadá para trabajar en elementos políticos, empresariales y todos los demás factores que resultarán beneficiosos tanto para Estados Unidos como para Canadá“.
Normalmente, un nuevo líder canadiense considera como prioridad inmediata una llamada telefónica con el presidente estadounidense, pero éste fue el primer contacto entre Trump y Carney desde que el canadiense asumió el cargo el 14 de marzo.
La oficina de Carney dijo que ambos tuvieron una “conversación muy constructiva” y acordaron iniciar “negociaciones integrales sobre una nueva relación económica y de seguridad inmediatamente después de las elecciones”.
Agregó, sin embargo, que Carney le dijo a Trump que su gobierno impondrá aranceles de represalia a los productos estadounidenses a partir del 2 de abril, cuando entrarán en vigencia amplios gravámenes estadounidenses.
El entusiasta mensaje de Trump representó un cambio drástico en el tono respecto de la retórica reciente entre Washington y Ottawa, que son aliados de la OTAN y socios económicos de larga data.
El presidente de Estados Unidos ha provocado furia en Canadá al insistir repetidamente en que debería convertirse en el estado número 51 de Estados Unidos y al imponer o amenazar con imponer aranceles al país.
Su publicación del viernes fue notable por su diplomacia, ya que Trump le dio a Carney su título oficial de primer ministro y no hizo ninguna referencia a su campaña de anexión.
En cambio, Trump solía menospreciar al predecesor de Carney, Justin Trudeau, con quien mantuvo una rivalidad de larga data, tildándolo de “gobernador” en referencia a sus llamados a que Canadá se uniera a Estados Unidos.
El nuevo primer ministro de Canadá, que está en una reñida carrera electoral para permanecer en el cargo, mientras tanto ha intensificado su retórica.
El ex banquero central fue elegido por el centrista Partido Liberal de Canadá para reemplazar a Trudeau, pero nunca se ha enfrentado al electorado del país.