
Furia y temor por agentes de inmigración de Trump en calles de EEUU
AFP
Los Angeles, Estados Unidos.- Tras caer la noche en las afueras de Los Ángeles, unas 50 personas hacen sonar ollas metálicas y sirenas frente a un hotel en una ruidosa protesta contra los agentes de inmigración estadounidenses.
La manifestación “No Sleep For ICE” (“Sin descanso para el ICE”), el pasado jueves, es reflejo de la creciente ira contra el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), una agencia otrora desconocida que se ha convertido en el foco de la represión a los inmigrantes lanzada por el presidente Donald Trump.
“Aterrorizan a nuestra comunidad todo el día. ¿Cómo pueden dormir bien?”, preguntó Nathanael Landaverde, de 23 años, mientras golpeaba una sartén.
Videos con imágenes dramáticas han mostrado a agentes federales, a menudo enmascarados y a veces armados con rifles de asalto, persiguiendo a migrantes y esposándolos en juzgados, en granjas o en las calles.
Funcionarios del ICE también han detenido a ciudadanos estadounidenses por presuntamente intervenir en arrestos, incluyendo a un candidato a la alcaldía de Nueva York esta semana.
La mano dura ha generado temor entre los inmigrantes y enfurecido a muchos estadounidenses, especialmente en ciudades liberales como Los Ángeles, donde este mes estallaron protestas callejeras a gran escala por las redadas del ICE.

“Si no duermen, no van a hacer su trabajo eficazmente. Van a tener menos gente”, añadió Landaverde, mientras los vehículos que pasaban tocaban la bocina en aparente apoyo a la manifestación nocturna frente al hotel.
No estaba del todo claro que los agentes del ICE se estuvieran alojando allí, pero los organizadores de la protesta afirmaron tener pruebas fotográficas de ello.
Decenas de personas bailaban al son de un ruido ensordecedor mientras ondeaban carteles que decían “Sin descanso para el ICE” e “ICE fuera de Los Ángeles”.
En el hotel, algunos huéspedes miraban a través de las cortinas.
“Están destrozando familias, y es horrible verlo en mi comunidad. No pueden dormir si van a hacer eso aquí”, dijo Juliet Austin, de 22 años, mientras tocaba un pequeño acordeón azul.
– “Policía secreta”-
Trump fue elegido para un segundo mandato en gran parte por su promesa de deportar masivamente a los migrantes irregulares.
Pero además de las tácticas agresivas de los agentes federales de inmigración, detractores de esta política han denunciado a los agentes por ocultar su rostro con máscaras, una práctica muy inusual -a pesar de legal- entre las fuerzas del orden de Estados Unidos.
“¿En qué momento como nación nos encontraremos con una policía secreta?”, escribió el mes pasado Walter Olson, investigador principal del grupo de expertos Cato Institute.
“Para la administración Trump, convertir las redadas con agentes enmascarados en una práctica habitual se enmarca en un esfuerzo más amplio por eludir la responsabilidad por acciones potencialmente ilegales e inconstitucionales”, añadió.
Legisladores presentaron ante el parlamento local californiano un proyecto de ley titulado “No a la Policía Secreta”, que restringiría el uso de mascarillas por parte de los agentes federales.
Las autoridades federales rechazaron estas críticas, alegando que los agentes usan mascarillas para protegerse de posibles represalias.
El ICE, a su vez, se jacta con frecuencia de sus acciones y ha publicado en redes sociales fotos de migrantes detenidos.
El organismo cuenta con el apoyo de Trump, quien el fin de semana pasado elogió la “increíble fuerza, determinación y valentía” de los agentes.
Aun así, parece poco probable que la ira contra el ICE disminuya mientras continúen las redadas contra migrantes y los manifestantes del jueves insistieron en que no cederán.
“Me parece una Gestapo moderna que actúa aquí, en Estados Unidos”, dijo Austin, profesora de danza. “No deben meterse con esta ciudad… No vamos a permitir que suceda. No estamos cansados”, añadió.