Infierno en Texas, registran incendios forestales fuera de control
Redacción Tribuna
Diversos incendios forestales afectaban el miércoles a Texas, sur de Estados Unidos, uno de ellos entre los mayores de su historia reciente y fuera de control, mientras varias localidades permanecían evacuadas y algunas propiedades fueron destruidas por las llamas.
Según el Servicio Forestal de Texas, 7 incendios permanecían “activos” el miércoles, localizados en el norte y el noreste del estado. Otros 16 siniestros, en el norte, noreste y este de Texas estaban contenidos (aun ardiendo pero sin avanzar), totalizando 23. Una decena ya estaban bajo control y fueron retirados de la lista.
Los mayores incendios activos golpean la zona conocida como Panhandle (mango de sartén, en español), bautizada así debido a la forma que tiene en el mapa esta área cuadrada en la parte superior, al norte de Texas. El más reciente reporte del Servicio Forestal del estado informaba de 418.500 hectáreas de áreas consumidas.
El mayor foco activo hasta el momento, conocido como Smokehouse Creek (norte), había quemado hasta el miércoles unas 344.000 hectáreas, y estaba “3%” bajo control. Se trata del segundo mayor incendio forestal registrado en el estado desde 1988, según datos oficiales.
Canadian, una de las ciudades cercanas al mayor incendio, tuvo varias áreas afectadas, aunque la población en riesgo ya había sido evacuada el martes. El alcalde de la ciudad, Terrill Bartlett, dijo este miércoles a CNN que no había nadie “gravemente herido”. “Nadie perdió la vida, pero algunas casas se quemaron“, explicó.
El meteorólogo de CNN, Chad Myers, dijo el martes que el fuego en Smokehouse Creek avanzaba a un ritmo de “dos campos de fútbol americano por segundo“.
Durante la noche del martes, la principal fábrica de armamento nuclear de Estados Unidos, Pantex, situada en las cercanías de una de las zonas afectadas, debió interrumpir temporalmente sus actividades. La empresa informó el miércoles en X que reanudó sus labores normalmente y que sus instalaciones ya no están bajo amenaza en el momento.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, informó que el presidente Joe Biden estaba recibiendo actualizaciones del siniestro y que estaban en contacto con el personal en primera línea.