La caída de Víctor Álvarez Puga
El glamour se le esfumó a Víctor Manuel Álvarez Puga. El empresario mexicano, esposo de la exconductora Inés Gómez Mont, fue detenido en Miami, Florida, por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). El motivo, oficialmente, no fue una orden penal, sino un problema migratorio: su visa estaba vencida. Sin embargo, detrás de ese detalle administrativo se esconde una de las tramas más escandalosas de corrupción y lavado de dinero en México.
La Fiscalía General de la República (FGR) acusa a Álvarez Puga de haber encabezado un sofisticado esquema de empresas fantasma, creado junto con su hermano Alejandro, a través del despacho Álvarez Puga y Asociados. Según la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), este bufete habría desviado y lavado alrededor de 2,950 millones de pesos provenientes de la Secretaría de Gobernación durante la administración de Miguel Ángel Osorio Chong. Las operaciones incluían licitaciones simuladas, contratos falsos y facturas por servicios inexistentes.
La captura del empresario, ocurrida el 24 de septiembre en Miami, fue notificada al Gobierno de México. La presidenta Claudia Sheinbaum confirmó que su administración ya trabaja para lograr su extradición, una vez que un juez estadounidense determine su situación jurídica.
“Estamos esperando toda la información de la Fiscalía y del gabinete de seguridad”, declaró.
Álvarez Puga se encontraba prófugo desde 2021, cuando un juez mexicano giró órdenes de aprehensión contra él, su hermano y Gómez Mont. Pese a ello, la pareja —junto con sus siete hijos— se refugió en Estados Unidos, donde mantuvo un estilo de vida propio de celebridades. En Miami, Gómez Mont adquirió una mansión valuada en más de 340 millones de pesos, propiedad que alguna vez perteneció a la cantante Cher. También compraron un departamento en Nueva York, cerca de Central Park, y presumían en redes sociales viajes, fiestas y una colección de bolsos Hermès Birkin valuada en millones de pesos.
El caso tiene ramificaciones políticas. Álvarez Puga mantiene vínculos con el abogado Juan Collado, hoy encarcelado, y con varios personajes del sexenio de Enrique Peña Nieto. Ambos compartieron negocios, amistades y hasta esposas famosas: Collado con la actriz Yadhira Carrillo, Álvarez Puga con Gómez Mont. Las investigaciones judiciales han mostrado esquemas financieros casi idénticos entre los dos.
Hoy, el empresario permanece recluido en el Krome North Service Processing Center, un centro de detención migratoria en Florida. Su defensa argumenta que pidió asilo político en Estados Unidos desde 2022, alegando persecución por motivos ideológicos. Pero las autoridades mexicanas no parecen dispuestas a dejarlo escapar de nuevo.
Mientras tanto, Inés Gómez Mont sigue prófuga. Su paradero es desconocido, y la Interpol mantiene activa una ficha roja para su búsqueda internacional. La FGR insiste en que ambos deben responder ante la justicia mexicana por los delitos de delincuencia organizada, lavado de dinero, defraudación fiscal y peculado.
El desenlace de este caso podría marcar un precedente: si el gobierno mexicano logra traer de vuelta a Álvarez Puga, demostraría que los tiempos de la impunidad dorada —esa que combinaba televisión, política y dinero público— comienzan a agotarse. Aunque, en México, todos sabemos que el guion de estas historias casi nunca tiene un final limpio.
#MañaneraPresidenta | 🚨 Claudia Sheinbaum informó que se espera la extradición a México de Víctor Álvarez Puga, acusado de lavado de dinero, delincuencia organizada y defraudación fiscal. 💰⚖️
El Gabinete de Seguridad dará más detalles en las próximas horas. 🇲🇽 pic.twitter.com/iV4aQSBS2p
— Juncal Solano (@juncalssolano) October 28, 2025
