En México, las mujeres ganan 15 por ciento menos que los hombres
Liliana Tecpanécatl
Actualmente en México, por cada 100 pesos que recibe un hombre como salario, una trabajadora desempeñando exactamente la misma labor, cobra 84 pesos, 15.8% menos solo por ser mujer. En cargos directivos, la diferencia es mucho más amplia y alcanza hasta el 40%.
Miguel Ángel Corona, profesor investigador de la universidad Iberoamericana, dijo que el problema es mucho más extenso de lo que parece. Porque no se trata únicamente del salario como tal. Las mujeres cobran menos y además desarrollan dobles jornadas.
No solo en el ámbito de la economía formal, ya que es común que al interior de las empresas , las mujeres desempeñen responsabilidades de más de un puesto de trabajo, sino en la familia misma, en donde son ellas las que encargan del cuidado de terceros, de la administración del presupuesto y en general, de mantener funcionando un hogar.
“Por el machismo, por esta situación que vivimos de que la mujer se hace cargo prácticamente de todas las labores del hogar, trabaja doble; por un lado cuando trabaja por una remuneración y cuando lo hace sin una remuneración en el hogar, ahí, ya hay una tremenda brecha, una tremenda desigualdad”.
El Índice Global de Brecha de Género 2023 del Foro Económico, señala que México ostenta la segunda disparidad salarial peor evaluada para las mujeres. En términos generales el país ocupa la posición 33 del ranking global que analiza 146 economías, pero en el terreno de equidad salarial por trabajos similares, cae al lugar 117.
Esta condición no es exclusiva de México. En Estados Unidos, la brecha salarial ajustada ha disminuido del 6.5% al 4.6% desde 2011. Sin embargo, aún podría llevar hasta el año 2070 cerrarla completamente.
En el Reino Unido, según un informe de la BBC, la brecha salarial en favor de los hombres está aumentando en casi la mitad, 45% y el informe del Foro Económico Mundial señala que en China, las mujeres perciben el 67% de los salarios de los varones.
Mientras que en países como Luxemburgo, Rumania, Eslovenia, Polonia, Bélgica e Italia la brecha oscila entre un 5% y hasta un 17%, en tanto que, en Namibia, Ruanda y Sudáfrica, la brecha supera el 35%. Miguel Corona, indicó que este fenómeno está directamente relacionado con la idiosincrasia de cada país.
“Es parte de la cultura, de una idiosincrasia, en donde la mujer juega papeles secundarios en ciertos lugares y en otros donde ha tenido la posibilidad de hacer valer sus derechos, esto es diferente; no se practica de la misma manera en todos los lugares, porque al final de cuentas eso también representa la manifestación social de los grupos de mujeres que han hecho valer sus derechos”.