Pilar Bravo
Debido a que en la franja limítrofe entre Puebla y Tlaxcala se mueven todos los días más de 10 mil personas que transitan de un lado a otro, la población requiere más opciones de transporte. Ante esta demanda, circula una gran cantidad de unidades pirata que no cuentan con registro en ninguna de las dos entidades.
El incremento de estas camionetas ha comenzado a generar enfrentamientos entre las líneas autorizadas y operadores irregulares, lo que ha elevado los conflictos y obligado a la intervención de las autoridades en los municipios conurbanos.
La Secretaría de Movilidad y Transporte de Puebla solicitó la mediación de la Secretaría de Gobernación estatal para atender el conflicto antes de que escale y pueda afectar a los pasajeros.
El gobierno poblano también desarrolla un estudio para conocer la cantidad de unidades que circulan en la zona, donde ya existen rutas de transporte legalmente establecidas. Sin embargo, ante la alta demanda de pasaje, las unidades irregulares operan con placas sobrepuestas y sin regulación vigente en esa franja.
La secretaria de Movilidad y Transporte, Silvia Tanús, encabezada por su titular, Silvia Tanús Osorio, informó que el estudio Origen-Destino permitirá identificar unidades que podrían operar en Tlaxcala, pero no en Puebla, donde es indispensable contar con el permiso correspondiente.
Por su parte, la titular de la dependencia, Silvia Tanús, señaló que las unidades detectadas deberán cumplir con la normativa local para garantizar un servicio seguro y dentro de la ley. Además, subrayó que en Puebla no se permitirá la operación de transporte sin concesión oficial.
Con estas acciones, el gobierno estatal busca frenar la irregularidad y proteger la movilidad segura en la zona metropolitana limítrofe.
