My Chemical Romance regresa a México con “The Black Parade”
My Chemical Romance está de vuelta en la Ciudad de México y promete hacer historia una vez más. La banda liderada por Gerard Way ha confirmado su regreso con un concierto en solitario el próximo 13 de febrero de 2026 en el Estadio GNP Seguros, como parte de su gira Long Live The Black Parade, la cual rinde homenaje al emblemático álbum que marcó a toda una generación emo en 2006.
La emoción por el anuncio, realizado el 19 de mayo, no tardó en hacerse notar en redes sociales, donde los fans revivieron recuerdos, desempolvaron delineadores y bromearon sobre tramitar su tarjeta HSBC para asegurar su entrada en la preventa del 22 y 23 de mayo. La venta general comenzará el día 24, y la banda sueca The Hives será la encargada de abrir la noche.
Una filtración reciente reveló cómo será la distribución del escenario en el Estadio GNP Seguros: contará con dos zonas principales en la pista —General A y General B— y conservará las gradas tradicionales. A diferencia de otros conciertos, no habrá secciones “Platino” ni asientos especiales con costos elevados, lo que ha sido bien recibido por los seguidores.
Se espera que el escenario esté a la altura del concepto teatral y oscuro de The Black Parade, con una producción que incluya vestuarios dramáticos, luces impactantes y una narrativa que trascienda la música en vivo. El show marcará la primera vez que My Chemical Romance interpreta el álbum completo en México desde 2007, cuando cerraron su gira mundial en el Palacio de los Deportes, una presentación que incluso fue documentada en el DVD The Black Parade Is Dead!.
Mamá soy emo
Más allá del escenario y la música, este regreso también revive una curiosa conexión con la cultura pop mexicana: el recordado episodio “Soy emo” de La Rosa de Guadalupe, transmitido en 2008, en el que aparece un póster de la banda y suena el himno “Welcome to the Black Parade”. Ese momento televisivo se ha convertido en un símbolo de la forma en que My Chemical Romance trascendió las fronteras del rock para instalarse en la memoria colectiva de miles de jóvenes mexicanos.
Con todo listo, el Estadio GNP se prepara para una noche cargada de nostalgia, emociones intensas y una celebración a la altura de una de las bandas más influyentes del rock alternativo de los 2000.
