Paramédicas de Puebla, orgullosas de cumplir su sueño

Puebla, Pue.- “La pena o la vergüenza ya no son un pretexto para cumplir los sueños”, aseveró Adriana Guadalupe Rodríguez Flores, coordinadora de generación de la Escuela en Técnico en Urgencias Médicas y voluntaria en la Coordinación de Socorros de Cruz Roja de la Ciudad de Puebla.

Con tan solo 28 años de edad, Adriana Guadalupe ha roto los estigmas de adentrarse a una labor que históricamente se ha considerado únicamente para hombres debido a diversos factores, principalmente la fuerza.

Indicó que, a la par, tomó la decisión de enfocarse al área de paramédicos para ayudar y abonar al bienestar de las y los ciudadanos, de ahí que inició su sueño con el respaldo de su madre y posteriormente de su padre, pues en su momento también fue difícil que aceptara su decisión.

El respaldo de mi mamá, de mi papá no tanto porque siendo una carrera especialmente para hombres era un poco más difícil para él aceptar esta decisión que me haya gustado estar en esta área de las ambulancias. Sobre todo ayudar a la gente, estar en una ambulancia, fue lo que más me llamó la atención”.

Refirió que inició en Cruz Roja durante 2014 y para 2015 ingresó al Área de Ambulancias, por ello, se ha preparado no solo académicamente, ya que es Técnico Superior Universitario en Paramédico y Licenciada en Enfermería, además, instructora en NAEMT (Asociación Nacional de Técnicos en Urgencias Médicas), así como de PHTLS, AMLS y GEMS.

Sino también físicamente, pues se necesita de fuerza para poder desempeñar su función de manera eficiente y eficaz, de ahí que entró al gimnasio y a realizar ejercicios de fuerza, pues, aseveró, los estigmas quedaron atrás, y la pena o la vergüenza ya no son más un pretexto.

“Ya todos esos estigmas ya quedaron atrás, ya afortunadamente hay muchas más mujeres en este ámbito porque ya la pena o la vergüenza ya no es un pretexto y si en algún momento sienten la necesidad o les gustaría formar parte de ser un técnico en urgencias médicas sin pena porque afortunadamente este ámbito es todavía más para mujeres”.

*Fundamental apoyo de compañeros* 

Aceptó que en nueve años de labores sus compañeros ofrecieron en todo momento apoyo y respeto, principalmente durante el inicio por temas de fuerza y debido a que no existían vestidores para mujeres.

Incluso, mencionó que solo eran dos féminas en dicha área, de ahí que: “siempre recibí el apoyo de mis compañeros, a pesar de que eran sólo hombres siempre recibí apoyo y respeto”.

Afortunadamente la verdad mis compañeros me recibieron bien en el ámbito laboral, nunca tuve algún desprecio, todos muy cordiales. Lo único fue la diferencia de que no existía vestidores para mujeres y a veces me tenia que cambiar frente a ellos, siempre con respeto, perder también la pena porque ya salió el servicio y cambiarme parta acudir”.

*Incrementa personal femenino*

Rodríguez Flores refirió que con el paso del tiempo incrementó el número de féminas que desempeñan tan noble y fundamental labor, y en todo momento las ánima a continuar con su formación porque existen diferentes alternativas para cumplir los sueños y las metas.

Teniendo a mis alumnas siempre cuando hacemos ejercicio o alguna actividad física, me dicen que no pueden y las motivo porque sí yo pude en su momento también ellas. Cuando estaba en el área de ambulancias eran contadas las mujeres, éramos dos, pero actualmente veo que se integran muchas más y si es el tema de la fuerza, todas siempre buscan alternativas”.

Puntualizó que está orgullosa de realizar lo que más ama: ayudar a los demás, pues aunque es un trabajo que requiere de sacrificios como dejar a la familia o ausentarse en fechas importantes, siempre recibió el apoyo necesario para avanzar y marcar un antecedente importante, ya que los obstáculos se los pone uno mismo.

Siempre recibí el apoyo y entendimiento de mi familia. Siempre te pierdes convivencia y momentos especiales, pero todo vale la pena al ayudar a quienes más lo necesitan”, concluyó.