Tribuna Deportes
El Puebla se despidió del torneo con un triunfo que sirve para cerrar con algo de orgullo una campaña complicada. La Franja venció este Sábado al León en el estadio León, en un encuentro correspondiente a la última jornada, donde ninguno de los dos equipos tenía algo en juego: los poblanos ya estaban condenados al último lugar de la tabla, mientras que los esmeraldas llegaban penúltimos y sin posibilidades de clasificar.
Pese a que el partido no tenía implicaciones deportivas, Puebla mostró iniciativa desde el arranque. Con un planteamiento ofensivo y mayor intensidad, el conjunto dirigido por Hernán Cristante aprovechó los espacios de una defensa guanajuatense desconectada y sin presión competitiva. La Franja encontró el gol en el primer tiempo tras una acción colectiva bien elaborada que terminó por romper el arco visitante.
León intentó reaccionar, pero la falta de precisión en el último toque y la ausencia de ritmo competitivo pesaron. Durante el complemento, Puebla controló los tiempos del juego y gestionó la ventaja, apoyado por su afición que celebró la entrega del equipo pese a la mala campaña.
Con este resultado, ambos clubes cerraron una temporada para el olvido. Puebla termina como colero general con números que reflejan la irregularidad del torneo, mientras que León apenas evitó el sótano por diferencia de puntos, quedando en la penúltima posición.
Aunque la victoria no modifica la situación en la tabla, sí deja una sensación de alivio para el conjunto camotero, que buscará reconstruirse para el siguiente torneo. El León, por su parte, tendrá que replantear su proyecto deportivo tras un semestre sin rumbo.
