
UE prohíbe químicos tóxicos en esmaltes de uñas

La Unión Europea dio un paso contundente en materia de salud pública: desde este 1 de septiembre queda prohibido el uso del óxido de difenilfosfina (TPO) y de la dimetil-p-toluidina (DMTA), dos compuestos habituales en esmaltes y geles semipermanentes de uñas. La razón: han sido clasificados como carcinogénicos, mutagénicos y tóxicos para la reproducción (CMR). En términos sencillos, estas sustancias pueden afectar la fertilidad, dañar el ADN y aumentar el riesgo de cáncer.
La decisión, contemplada en el Reglamento (UE) 2025/877, implica que ningún salón de belleza o comercio podrá seguir usando productos que contengan estos químicos. Y no se trata de una restricción gradual: es una prohibición total e inmediata.
El asunto revela un problema mayor. Como explicó Nicolás Olea, catedrático emérito de la Universidad de Granada, la lista de compuestos tóxicos presentes en cosméticos es extensa y la regulación avanza con una lentitud desesperante. Según sus cálculos, una mujer española puede exponerse diariamente a más de 500 sustancias químicas solo a través de productos de higiene y belleza. Y lo más preocupante es que muchos de esos compuestos actúan como disruptores endocrinos, es decir, interfieren con el delicado equilibrio hormonal del cuerpo humano.
Otros expertos, como el toxicólogo Miguel Motas, advierten que la exposición profesional en salones de manicura es la más peligrosa: la inhalación del TPO o el contacto con el DMTA puede provocar intoxicaciones agudas y daños severos en hígado y riñones.
La Comisión Europea anuncia que en 2025 y 2026 vendrán más prohibiciones, incluyendo microplásticos y nanopartículas de metales. Bienvenido el endurecimiento de las normas, pero hay que decirlo claro: llegan tarde. La evidencia científica sobre la toxicidad de estos compuestos se acumulaba desde hace décadas. Una vez más, la política se mueve a paso lento frente a un riesgo que avanza mucho más rápido.