Británica Raducanu, de 18 años, primera finalista de un Grand Slam desde fase previa
La tenista británica Emma Raducanu, de 18 años, arrasó el jueves a la griega Maria Sakkari en las semifinales del Abierto de Estados Unidos y se convirtió en la primera finalista de un Grand Slam partiendo desde la fase de calificación.
La británica, número 150 del ranking mundial, avasalló a Sakkari, número 18, por 6-1 y 6-4 en una hora y 23 minutos de juego en la pista central de Flushing Meadows.
Raducanu, que no ha cedido un solo set en el torneo, disputará el sábado la final del US Open ante otra joven prodigio, la canadiense Leylah Fernández, de padre ecuatoriano y que cumplió 19 años el pasado lunes.
Raducanu y Fernández, que eliminó el jueves a la bielorrusa Aryina Sabalenka, número dos mundial, protagonizarán la primera final de Grand Slam entre menores de 20 años desde que Serena Williams (17 años) venció a Martina Hingis (18) en el US Open de 1999.
“Honestamente, hoy no pensaba en nadie más, salvo yo misma”, dijo la británica, que aseguró no sentir ningún vértigo por su hazaña.
“Vengo de la fase de calificación, técnicamente no tengo presión”, sostuvo con una sonrisa.
Si se compara la precocidad de estas jugadoras con la de una superestrella como Serena Williams, la estadounidense conquistó el primero de sus 23 títulos de Grand Slam a los 17 años en el US Open de 1999, tres años antes de que nacieran Raducanu y Fernández.
Raducanu, de madre china y padre rumano, ha fulminado numerosas marcas de precocidad en apenas su segundo torneo grande.
Su primera irrupción fue en junio en el pasado Wimbledon, ante su público, donde alcanzó los octavos de final convirtiéndose en una nueva figura del deporte de su país.
En Nueva York, donde ha jugado nueve partidos en 16 días, Raducanu ha despegado hasta convertirse en la finalista de un Grand Slam más joven desde Maria Sharapova en 2004 con 17 años.
Nacida en Canadá y criada desde pequeña en Londres, Raducanu tendrá la oportunidad de ser la primera británica que gana un título de Grand Slam desde Virginia Wade en Wimbledon en 1977.
– Ningún set en contra –
Sakkari, de 26 años, llegaba a su segunda semifinal de Grand Slam del año, tras la de Roland Garros, después de batir a tres de las 10 primeras cabezas de serie: las checas Karolina Pliskova (4º) y Petra Kvitova (10º) y la canadiense Bianca Andreescu (6º), campeona del US Open de 2019.
Pero nada más empezar el juego Raducanu le aplicó dos golpes emocionales. En el segundo juego remontó un 40-0 en contra para romperle el servicio y en el tercero otro 40-0 para mantener el suyo.
La griega se marchó a cambiarse el vestuario pero a su vuelta la tendencia no cambió y Raducanu consiguió un segundo quiebre para colocarse 4-0.
A Sakkari le estaba traicionando su servicio, el mismo con el que encadenó 22 puntos seguidos en los cuartos ante Pliskova.
A diferencia de la checa, que regaló demasiados errores no forzados, Raducanu se lució en la devolución y alargó los puntos a la espera de que la griega se precipitara.
Con una clase magistral de tenis defensivo y asegurando sus ataques, la británica se hizo con el primer set por un imponente 6-1 en apenas 36 minutos.
En la segunda manga, la joven mantuvo la presión sobre el saque de Sakkari y volvió a quebrar en el tercer juego para avanzarse 2-1.
La griega sacó entonces su afamada garra para salvar dos pelotas de ruptura y quebrar después a Raducanu para acercarse 4-3, celebrándolo con rabia.
Sakkari, sin embargo, necesitaba de un segundo quiebre que no le permitió Raducanu, quien llegara a la final con un registro inmaculado de 18 sets ganados y ninguno perdido.