Con buenas o malas noches, el impiadoso Brasil trota hacia Catar
Hace una exhibición y gana; juega mal y también suma de a tres. Aunque diezmado, el impiadoso Brasil dejó atrás a Chile y camina a Catar a costa de colonizar Sudamérica, aunque ahora le espera su tormento, la Argentina de Messi.
“¿Jugamos bien? ¡No! ¿Ganamos? ¡Sí!”. El mensaje de Neymar resume el partido de la ‘Seleçao’ el jueves en Santiago.
El pentacampeón derrotó con lo justo (1-0) a La Roja de Arturo Vidal y patentó un nuevo récord en el premundial sudamericano, el de mejor arranque con el formato actual: siete victorias en igual número de juegos.
“Seguimos haciendo historia”, remató en Instagram el astro del PSG, quien estuvo errático en la entrega y aún no está en su plenitud física. Son “números impresionantes”, afirmó el técnico Tite.
Líder solitario con 21 puntos, a falta de once juegos, Brasil se acerca al listón necesario -de entre 27 y 29 unidades- para clasificarse a la Copa Mundo, a la que Sudamérica tiene cuatro cupos directos y uno más a la repesca.
Ya venció a siete de los nueve rivales regionales, apenas le faltan Argentina, a la que recibirá el domingo en Sao Paulo, y Colombia, contra la que chocará en octubre.
Ante los chilenos, séptimos de la tabla, con seis enteros, tuvieron una de sus peores actuaciones en el camino a Catar-2022.
“Hay un desafío muy grande para establecer movimientos, engranajes, enlaces de once atletas que nunca habían jugado juntos”, justificó Tite.
En buena medida la opacidad se debió a la ausencia de una docena de brasileños que actúan en clubes de Inglaterra, Portugal y Rusia que no fueron prestados por sus ligas porque debían aislarse a su regreso debido a los protocolos sanitarios contra la pandemia en esos países.
En Santiago, la ‘Canarinha’ sintió las bajas de siete jugadores que suelen ser titulares o primera opción de cambio, como Ederson, Alisson, Thiago Silva, Fred, Richarlison, Gabriel Jesus y Roberto Firmino.
Y también padeció las pocas opciones de recambio en la zona ofensiva por el regreso obligado a Rusia de Claudinho y Malcom.
“Tuvimos oportunidades, pero faltó un poco de coordinación en los movimientos”, apuntó el entrenador.
– Baja sensible contra Messi –
El DT alineó un once inédito que plantó cara a una selección reconocida por su coraje, aunque sin Alexis Sánchez ni Ben Brereton en el ataque.
Pero aun así Brasil pasó aprietos. Weverton desvió tres pelotas claras y el equipo encajó el cotejo con menos posesión (39%) y más oportunidades de gol permitidas (4), según estadísticas de SofaScore.
“Creo que fue mi mejor actuación, el partido en el que más trabajé. Todos vieron la dificultad del juego, principalmente el primer tiempo”, dijo el portero del Palmeiras.
Con todo y eso, el ‘scratch’ de Tite, al que le cuesta enamorar a los brasileños, lleva 17 partidos ganados y dos empates en el premundial desde que el exentrenador del Corinthians asumió el cargo, en junio de 2016.
“No estamos en el punto ideal, estamos en una fase de construcción de equipo, espero que estemos en plenitud de crecimiento en el Mundial”, sostiene Tite.
En el camino hacia la “construcción de equipo” se atravesará la Argentina de Messi, en el primer clásico sudamericano tras la victoria albiceleste en el Maracaná en la final de la Copa América-2021 en julio.
A la docena de bajas se sumó una muy sensible, Marquinhos, clave para que la defensa brasileña sea la menos vulnerada de la competición, con apenas dos tantos recibidos.
El zaguero del PSG se perderá el duelo contra el segundo del clasificatorio por acumulación de amarillas.
Entre Lucas Veríssimo y el veterano Miranda saldrá el acompañante de Eder Militao para intentar frenar a ‘La Pulga’, sedienta de propinarle a Brasil la primera derrota en casa en una eliminatoria sudamericana.
“Conseguir siete victorias es un hecho para la historia. ¡Que venga la octava!”, dijo Everton Ribeiro, autor del gol contra Chile, con la confianza que otorga jugar para una selección que suele ganar con cara y con sello
