Don Drusso mantiene vivo el recuerdo de su madre vendiendo rompopes ‘Doña Margot’
Redacción
Con cariño y dedicación, don Drusso Évoli sigue el legado de su madre, doña Margot Andrade, vendiendo los deliciosos rompopes artesanales que ella solía preparar.
Desde hace más de 60 años, los rompopes “Doña Margot” se han convertido en un símbolo de la tradición y el sabor tabasqueño.
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Doña Margot, conocida cariñosamente como “Gotita”, aprendió a preparar este exquisito rompope a una edad temprana y lo compartía con su familia y amigos. Su receta, hecha a base de huevo, leche, vainilla y nueces, se volvió tan popular que decidió venderlo, especialmente durante las fechas decembrinas.
Hoy, don Drusso continúa la tradición, produciendo el rompope de manera artesanal, sin utilizar maquinaria industrial. Aunque cuenta con un gran equipo que se multiplica en diciembre para satisfacer la alta demanda, Don Drusso asegura que cada botella lleva el mismo sabor y dedicación que su madre le enseñó.
Es un honor mantener viva la memoria de mi madre a través de estos rompopes. Cada botella es un recordatorio de su amor y dedicación”, comentó don Drusso mientras supervisaba la producción en su pequeña fábrica en Jalapa.
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Los rompopes “Doña Margot” no solo son una delicia para los tabasqueños, sino que también han ganado popularidad en otras regiones de México.
Este año, se espera que se vendan más de 16 mil botellas, asegurando que nadie se quede sin probar este tradicional y delicioso rompope en sus celebraciones navideñas.