Ledecky cede otra corona olímpica a Titmus pero se consuela con oro en 1.500 m
La nadadora estadounidense Katie Ledecky sumó el sexto oro olímpico de su carrera deportiva al adjudicarse este miércoles el oro en los 1.500 metros en estilo libre, donde se convirtió en la primera campeona de la historia de la especialidad en unos Juegos, ya que es una de las novedades de Tokio-2020.
Ledecky, que había cedido la corona en 200 y 400 m libre a la australiana Ariarne Titmus en sus dos primeras finales en estos Juegos, era la grandísima favorita al título, como autora de los diez mejores cronos de la historia en esta distancia larga.
La nadadora de Washington realizó toda la carrera sola en cabeza para terminar con un tiempo de 15 minutos, 37 segundos y 34 centésimas, por delante de su compatriota Erica Sullivan (15:41.41, plata) y de la alemana Sarah Kohler (15:42.91).
“Estoy orgullosa de dar una medalla de oro al equipo estadounidense”, respiró aliviada Ledecky tras su triunfo.
La reina de la piscina de Rio-2016, que ganó cuatro oros hace cinco años en Brasil, perdió el lunes su primera final en Tokio-2020, al quedar segunda en 400 m libre. Este miércoles, poco antes de la final de 1.500 m, había disputado la de 200 m libre, donde apenas pudo quedar en quinto lugar (1:55.21 frente al 1:53.50 de la ganadora Titmus)
En el menú de Ledecky este miércoles todavía están pendientes las series de 4×200 metros en la sesión de tarde. En esa prueba las estadounidenses son las defensoras del título.
El jueves, Ledecky afrontará las series de los 800 metros libre.
En esas dos pruebas intentará seguir encontrando consuelo tras las decepciones de sus derrotas contra Ariarne Titmus en 200 y 400 metros libre.
La nadadora australiana se confirma así como protagonista en el inicio de las pruebas de natación de estos Juegos de Tokio.
El plato fuerte está servido
Junto a esos dos finales, la expectación en la piscina olímpica en la sesión matinal del miércoles la generó la semifinal de los 100 metros libre masculino, la prueba reina, cuya final se disputa el jueves.
El ruso Kliment Kolesnikov, que compite bajo bandera neutral y que estableció un nuevo récord de Europa (47.11), fue el más rápido, por delante del favorito estadounidense Caleb Dressel (47.23).
La estrella de la natación del ‘Team USA’ apunta al reto de colgarse seis títulos olímpicos en Tokio, después de haber logrado ya el oro en su primera final, la del relevo 4×100 m libre.
El australiano Kyle Chalmers, defensor del título olímpico en esta distancia y también entre los favoritos, estuvo más discreto en semifinales, con el sexto mejor tiempo (47.80), detrás sobre todo del italiano Alessandro Miressi (tercer mejor crono, 47.52) y del surcoreano Sunwoo Hwang (cuarto mejor con 47.56, nuevo récord de Asia).
Dressel se enfrentará por lo tanto el jueves a una final que se presenta explosiva en la categoría reina.
“Es un poco lo que esperaba. La final será muy rápida. No hay ningún favorito en este momento, la carrera va a ser divertida, estoy deseando que llegue. Los ocho tienen opciones y va a haber espectáculo”, vaticinó el nadador de Florida a su paso por la zona mixta.
En las finales del miércoles, más allá de las dos disputadas por Ledecky, destacó el nuevo éxito de la japonesa Yui Ohashi, que firmó un doblete de títulos al imponerse en la final de 200 metros estilos (2:98.52) tras haberlo hecho ya el domingo en la de 400 metros estilos.
El joven húngaro Kristof Milak estrenó su palmarés olímpico imponiéndose en la final de los 200 metros mariposa (1:51.25), mientras que Gran Bretaña fue el vencedor en el relevo masculino 4×200 metros en estilo libre, en una prueba en la que Estados Unidos quedó fuera del podio (4º).
Dressel decidió finalmente no formar parte de ese relevo para no cargar todavía más su copioso programa de Tokio-2020.