Redacción de Tribuna Noticias
El Señor de las Maravillas es uno de los Santos más venerados y queridos por los poblanos, por esta razón cada primero de julio realizan una fiesta a lo grande para agradecer, pedir y renovar votos con el beato.
Esta es una de las celebraciones religiosas más importantes para los de la Angelópolis a la que acuden creyentes de todo el país. En esta ocasión la fiesta empezó desde muy temprano con las mañanitas acompañadas de mariachis en el Templo de Santa Mónica.
Durante el festejo además de la tradicional Misa hubo diferentes puestos de antojitos mexicanos que pudieron disfrutar todos los presentes, así como canticos, música y muchas flores.
El Señor de las Maravillas es la representación de Jesús bajo la Cruz ensangrentado durante una de las caídas previas a su muerte.
Historia del Señor de las Maravillas
La leyenda cuenta que una mujer con un esposo en la cárcel iba cada tarde a pedir a la iglesia que su marido obtuviera la libertad, posteriormente visitaba a su cónyuge. Un día cuando la mujer iba camino a la prisión se topó con otro prisionero al que le ofreció comida.
Tiempo después su esposo salió de la cárcel y la mujer no abandonó su buena acción con el prisionero, su marido al desconfiar de ella le preguntó sobre sus salidas y ella contestó: “Llevo maravillas para el Señor”.
En ese instante el canasto que contenía comida se convirtió en flores; sorprendidos ambos buscaron al preso y al no encontrarlo se dirigieron a la iglesia a dejarle las flores a la imagen de Jesús a la que le rezaba su mujer.
A partir de ese momento se convirtió en una tradición llevarle flores y festejar al Señor de las Maravillas.