Primera ofrenda, la bienvenida después del adiós en las Cholulas
Liliana Tecpanécatl Suárez
Puebla, Pue.- A las doce del día, del 1 de noviembre, en las Cholulas, los domicilios en donde hubo un fallecimiento en el último año, abren sus puertas para recibir a las ánimas y con ellas, a todas las personas que deseen ser parte de la Primera Ofrenda.
La tradiciones de los altares, en estas fechas, están muy arraigadas en el Pueblo Mágico y toman especial relevancia cuando se trata de recibir a aquellos que regresan por vez primera del mundo de los muertos, a compartir con sus seres queridos.
Fabiola Maxil y su familia, recibieron en esta ocasión a su padre. Don Porfirio encontró en su primera ofrenda buñuelos, ate de membrillo, mezcal, tamales, papas fritas, chocolates, sus libros favoritos, pues cada integrante de la familia se encargó de colocar algo especial para su llegada.
Todo es especial, porque todos sabían una parte importante de sus gustos, tenemos por ejemplo mi sobrina Claudia trajo sus dulces y su pan, mi cuñada le preparó el ate de membrillo, mi tía le trajo sus tlatlapas, mi hijo le compró su colorado con crema”.
Desde su perspectiva, la ofrenda es un acto de amor, contrario a lo que algunas personas piensan, sobre que se actúa desde el sentimiento de culpa; Fabi señaló que ofrecer lo que le gustaba al difunto, es una forma de sobrellevar el duelo, de vivir estás fechas en familia, pero sobre todo, homenajear a los que se fueron.
Hay algo bien importante, a veces creemos que estás cosas son para sacar algo que a lo mejor en su momento no hiciste con las personas, que te sientes culpable, pero a nosotros el hecho de haber convivido con nuestros padres y poder tener la oportunidad en su momento de darles lo que pudimos, para nosotros esto es como bien lo dice, una ofrenda de amor”.
La tradición de la Primera Ofrenda, se desarrolla sobre todo entre el 1 y 2 de noviembre, hasta el medio día qué es cuando, según la creencia popular, las ánimas vuelven al mundo de los muertos, no obstante, las familias esperan a sus seres queridos el día que de acuerdo a la tradición, les toca llegar, por el ejemplo el 28 de octubre a los accidentados o el día 29, a quienes fallecieron ahogadas.
Al visitar la primera ofrenda, los amigos y familiares de los deudos reciben además, parte de los alimentos que se comparten con las ánimas, como tamales, mole, hojaldras, fruta o atole. De acuerdo con el presupuesto de cada familia, los difuntos son esperados además con mariachi, marimba o banda.