Promueve Turismo altares monumentales de Huaquechula
Instalarán 28 altares en honor al mismo número de personas fallecidas en el año, cuyo costo por familia oscila entre 10 mil y 50 mil pesos
CIUDAD DE PUEBLA, Pue. – Con el propósito de difundir las costumbres y tradiciones del interior del estado en esta temporada del “Día de Muertos”, la secretaria de Turismo, Marta Ornelas Guerrero anunció, como parte del gobierno presente de Sergio Salomón y junto con autoridades municipales de Huaquechula, la instalación de 28 altares monumentales, catalogados como Patrimonio Cultural del Estado. Estos altares podrán ser visitados a partir del 28 de octubre y hasta el 02 de noviembre, período en el que se estima la llegada de más de 50 mil personas y una derrama económica de 500 mil pesos.
En rueda de prensa, la funcionaria invitó a las y los poblanos a asistir a esta comunidad ubicada en la Mixteca poblana, a sólo 50 minutos de la capital, cuyos habitantes tienen profundamente arraigada esta tradición y son hospitalarios con los visitantes. Además, comentó que, en esta ocasión, se colocará un altar monumental en Brooklyn (Nueva York, Estados Unidos) para que los connacionales vivan esta experiencia única, que también será admirada por turistas de diversas partes del mundo.
Por su parte, el director de Comunicación Social de Huaquechula, René Hernández Martínez detalló que, de los 28 altares monumentales de este año, cuatro serán instalados el 28 de octubre en honor a las personas que han fallecido por accidentes; uno el 31 de octubre en memoria de un niño que pereció, y el resto se colocará el 01 de noviembre. Cada familia que rinde culto a sus deudos gastará entre 10 mil y 50 mil pesos.
Finalmente, el director de Cultura, Silverio Reyes Sarmiento precisó que estos altares están catalogados como Patrimonio Cultural del Estado de Puebla desde 1997. Constan de al menos tres niveles: el primero representa el mundo terrenal y lo que le gustaba al difunto; el segundo incluye todos los santos o ángeles de la persona fallecida con el fin de que le ayuden a escalar el último peldaño; y el tercero simboliza el cielo, adonde debe llegar la persona finalizada.