Se niegan a cobrar indemnizaciones Campesinos de Zacatepec tras perder cosechas

Redacción.- A finales del pasado mes de mayo, ejidatarios de Santa María Zacatepec localidad del municipio de Juan C Bonilla, atestiguaron la aparición de un socavón en sus tierras de cultivo. La secretaría de Desarrollo Rural en la entidad, procedió a realizar el censo de los campesinos afectados por este fenómeno, sin embargo, al menos una decena de ellos se niega a ser indemnizados.

Así lo informó la  titular de la dependencia, Ana Laura Altamirano, quien dijo que en una primera etapa, se identificó a un grupo de ocho productores agrícolas afectados, se trata de aquellos cuyas tierras desaparecieron con el hundimiento, y todos ya recibieron la compensación correspondiente por parte del estado.

Sin embargo posteriormente se integró un padrón de 13 campesinos más, que ya no pudieron ingresar a sus predios, porque éstos forman parte del perímetro de seguridad del hundimiento, y de este grupo, solo 3 han acudido a recoger sus cheques de indemnización, mientras que el resto, se niega a ello.

La razón es que el comisariado ejidal, asegura que se trata de una artimaña del estado, para despojar a los campesinos de sus tierras, versión que ha sido rechazada tajantemente por el gobernador Miguel Barbosa Huerta.

“Ya se indemnizó las cosechas afectadas, se va a indemnizar los predios que fueron afectados, unos ya recogieron el importe de su indemnización y otros no porque el comisariado ejidal está diciéndoles que no lo reciban porque el gobierno del estado quiere construir, seguramente un desarrollo inmobiliario moderno y por eso hay que pedir más, ¿verdad?, así funciona en esa mente de los señores”.

Los campesinos afectados se dedicaban al cultivo de maíz, alfalfa, frijol y hortalizas, por lo que los cheques de indemnización cubren el monto de las cosechas perdidas.

Sobre la indemnización a la familia Sánchez Xalamihua, cuya casa fue devorada por el socavón, se informó que ya se adquirió el terreno en donde se construirá su reemplazo. Tuvo un costo de 180 mil pesos, que pagó el gobierno estatal y una vez que la escritura esté lista, se procederá a iniciar la obra, de la que ya se  tienen planos.