Se sumó Puebla al repique de campanas, pide alto a la violencia

Este martes 20 de junio, a las tres de la tarde, las campanas de todos los templos católicos en Puebla, repicaron por un minuto en memoria de Javier y Joaquín, sacerdotes jesuitas asesinados hace un año en la Sierra Tarahumara, por José Noriel N, mejor conocido como “El Chueco”.

Esta actividad se replicó en todo el país como una forma de recordar el caso, que tras un año sin resolverse se ha convertido en un ícono más de la violencia en México. Para el caso de Puebla, todos los templos se sumaron, encabezados por la Catedral Metropolitana.

De acuerdo a un comunicado emitido por la Arquidiócesis, el repique de campanas también se realizó para recordar a todas las víctimas de la delincuencia en el país, por lo que feligreses y sacerdotes, rezaron para que haya paz en México.

Así mismo, el pasado 18 de junio, se hizo una misa en la Basílica de Guadalupe, Ciudad de México, por los padres jesuitas asesinados en el templo de Cerocahui, Chihuahua, que intentaron proteger al guía turístico Pedro Palma, que iba huyendo de “El Chueco”.

De acuerdo a información de medios internacionales, el homicida asesinó al guía porque no lo saludó amablemente, perdió el control y comenzó a golpearlo. La víctima buscó refugio en la parroquia donde se encontraban los sacerdotes jesuitas, pero “El Chueco” lo siguió hasta ahí y alegando a un supuesto brote psicótico, acribilló a los tres.