¿Cómo llevar las finanzas personales con éxito?
Liliana Tecpanecatl
La semana pasada se dio a conocer que la inflación en México llegó al 8.15% durante julio, la más alta en los últimos 22 años, pero, ¿Qué es la inflación? ¿Hay algo que yo pueda hacer para contener su impacto? ¿Qué no debería hacer para agravar sus efectos?
En términos sencillos con cada aumento en la inflación, el dinero alcanza para menos, es decir, la capacidad de compra de las personas disminuye. Aunque esta la definen factores internacionales, en casa, sí existe una forma de paliar sus efectos.
Marco Antonio Barrón, investigador de la UPAEP, hace una primera recomendación, utilizar el sentido común. A la hora de distribuir el gasto familiar es importante actuar con sensatez y prudencia, el autocontrol es la primera y más poderosa herramienta para enfrentar la crisis.
“El primer error que cometemos es no escuchar a la persona adentro de ti y que se llama sentido común, nosotros al no atender consejos financieros o no tener educación financiera, nos puede llevar a un desequilibrio en las finanzas, lo primero es oírte a ti mismo decir si eso es bueno o malo”
Lo segundo es hacer un presupuesto, se trata de escribir todos los ingresos y todos los gastos e identificar aquellos que pasan desapercibidos o que son innecesarios y eliminarlos. El objetivo del presupuesto es no gastar más de lo que se gana.
La tercera recomendación es evitar el endeudamiento. Diga no a las tarjetas de crédito, no a los préstamos personales con altas tasas de interés, no a las compras a plazos que puedan llegar a comprometer sus finanzas en el mediano plazo. El crédito no es una extensión de los ingresos.
“A lo mejor tu tarjeta de crédito y el artículo que quieres comprar es de 2 mil 500 y tú dices, me lo doy y te lo compras, ese sería el siguiente problema al que nos podemos enfrentar, que vas a gastar más de lo que ganas, porque e dinero del crédito no es tuyo”.
Ahorrar todo lo posible, es una recomendación que parece imposible, pero es necesario atenderla. Si en casa las finanzas no dan para tener una cuenta en el banco o un “guardadito” bajo el colchón, empecemos por lo simple.
Hay que aprender a comparar precios y comprar donde sea más económico, aprovechar ofertas, evitar desperdicios de comida, papel higiénico, luz o gasolina. Ahorrar donde se pueda.
Por último, en las familias en las que ya hay deudas o compromisos financieros a largo plazo, el economista recomienda no caer en pánico. Seguir todas las recomendaciones anteriores y en cuanto a las deudas, buscar cancelarlas o reestructurarlas, y no seguir dependiendo de los créditos.
