Visita el corredor de figuras de yeso para el nacimiento en la Central de Abasto

Desde el año 1223, la tradición de colocar un nacimiento, también conocidos como pesebres o belenes, está vigente para ejemplificar el nacimiento de Jesús, siendo el 8 de diciembre cuando sólo se colocan las figuras de María, José, reyes magos, pastores, ovejas, una mula y un buey.

Para el 24 de diciembre, las familias, sobre todo las iglesias, recuerdan el día del nacimiento del niño dios, por lo que se arrulla, los presentes lo besan y posteriormente lo colocan entre María y José, sin embargo, desde hace aproximadamente cinco años ha disminuido el interés de las y los ciudadanos.

Por ello, el Consejo General de la Central de Abasto de Puebla implementó, junto al área de báscula, un corredor en donde productores de figuras de yeso, paxtle, paja, lama, entre otros artículos que se utilizan para colocar un nacimiento, puedan exponer y vender su trabajo.

En entrevista, Isabel Hernández Domínguez, quien comercializa dichos productos desde hace 15 años, aceptó que lamentablemente desde hace cuatro o cinco años ya no venden como anteriormente lo hacían, pues hasta este martes 13 de diciembre sólo han alcanzado el 20 por ciento, pero esperan aumentar hasta 70 por ciento.

“La verdad es que se está perdiendo la tradición principalmente desde la pandemia o tal vez por la economía porque ya no es como antes que se compraba de todo. Antes venían por cajas de luces de bengala y hoy vienen por una docena, tres cajitas de las chiquitas, la verdad se está perdiendo mucho la tradición. Son más clientes mayores porque jóvenes son más de árboles que de nacimiento”.

Refirió que buscan vender lo más barato posible, de ahí que las figuras van desde 10 pesos hasta mil 300 o mil 500 el nacimiento completo que incluye figuras de hasta 80 centímetros, así como paxtle, lama, casitas, piñatas y paja.

“Ahorita está más o menos, se está vendiendo un poco más y si está saliendo un poco más la figura que años anteriores. Esperemos que sigan más para que sigan comprando, nosotros estamos dando lo más barato que se puede para que también la gente pueda comprar todos sus productos. Estamos esperando incrementar 70 por ciento”.

Guadalupe Hernández, comerciante de noche buenas, cactus, rosales, hierva y árboles, confió en que el 24 de diciembre aumentará al menos 40 por ciento sus ventas, ya que no avanzan como esperaban, después de la pandemia de coronavirus.

“Van más o menos, no como esperábamos, pero ahí va. Esperemos que el 24 ya hayamos terminado como esperamos, pero a comparación de hace un año si hemos avanzado. Hay árboles desde 170, 130, 210, dependiendo el tamaño. Las noche buenas son de 45 y 65, dependiendo de su tamaño. Esperamos vender el 100 por ciento, solo Dios sabe”.

Jhony Méndez, artesano de casitas que van de 100 y hasta 200 pesos, así como de hasta 3 por 3 metros, refirió que las ventas están muy flojas, al destacar que antes de la pandemia descargaban entre 10 y 15 viajes, sin embargo, ahora sólo han hecho uno y no han vendido.

“Nosotros elaboramos las casitas para esta temporada navideña. Desde principio de enero se puede elaborar y legamos a elaborar hasta 300 casitas. A comparación, antes de la pandemia, teníamos mucho trabajo y descargábamos entre 10 y 15 viajes de casitas,pero por la pandemia apenas se está componiendo, incluso, este año apenas hemos bajado un viaje y lamentablemente estamos muy afectados desde la pandemia”.

Aceptó que la tradición de colocar un nacimiento se está terminando porque anteriormente las familias se esmeraban para colocarlo y ahora por el trabajo, la tecnología, la economía, entre otros factores, solo se enfocan en poner un árbol de navidad.

“Yo creo que como familia se debe continuar con la tradición de los nacimientos, antes se hacía en familia, pero ahora se pierde mucho por los temas de la tecnología y ya no se le da el mismo interés. Como familia se reunía uno para acomodar un nacimiento y sinceramente ahora por pretextos como trabajo, estar en el teléfono, se olvida el acomodo del Niño dios”.

Gabriela Ponce Corona, comerciante de figuras de yeso, luces navideñas, esferas, lama y musgo, señaló que es muy difícil vender los nacimientos, sin embargo, la venta de árboles y aditamentos aumentó hasta 20 por ciento.

“Este año han estado un poco bajas las ventas, por eso la Central nos dio este espacio para que podamos darle un poco de publicidad, podamos vender y mejore un poco la venta porque está muy flojo. Cada vez es un poquito menos, antes se buscaban nacimientos grandes, espaciosos, y ahora lo que más se vende son los árboles, las esferas y las luces. El nacimiento es lo que ha ido cayendo, esas costumbres y tradiciones (…) desde hace aproximadamente cuatro o cinco años”.

Ponce Corona invitó a las y los poblanos a acudir a la Central de Abasto por sus adornos navideños y no comprarlos en centros comerciales, ya que es más caro y no existe variedad, además, de que abonarían a las tradiciones y a mejorar las condiciones de todos los artesanos.

“Invitamos a toda la gente a que venga, se den una vuelta, y vean todo lo que tenemos para comprar y realicen todo su nacimiento. Lo que más vendemos son las esferas, luces y arbolitos. Las ventas han mejorado a comparación de la pandemia, al menos 20 por cientos”, concluyó.