“El Darién es una selva, no un camino”, lema ante la crisis migratoria en Panamá
Redacción Tribuna
“El Darién es una selva, no un camino”, bajo ese lema el Gobierno de Panamá anunció el lanzamiento de una campaña para abordar la delicada crisis migratoria en la que las cifras ya llegan a niveles récord.
Según los informes entregados este lunes 28 de agosto por el Ministerio de Seguridad Pública de Panamá, desde el 1 de enero de 2023 hasta la fecha, por la selva del Darién han pasado 320.098 migrantes irregulares con destino a Estados Unidos. De ese número, 190.889 son venezolanos, 42.441 ecuatorianos y 35.495 haitianos.
La cifra de lo que va del año supera con creces a los 248.284 migrantes que atravesaron el mismo paso fronterizo en 2022 y se aleja bastante de los 133.726 de 2021.
“La crisis ha escalado, en 2016 hablábamos de 20.000 en un año y ya se trataba de crisis”, dijo la directora del Servicio Nacional de Migración, Samira Gozaine, quien también señaló que, aunque en abril Estados Unidos y Colombia se comprometieron para trabajar unidos en contra de las redes de contrabando que han facilitado el flujo de migrantes, la realidad es que ha faltado el intercambio de información, así como de acciones conjuntas para implementar las medidas.
Por su parte, Naciones Unidas proyectó a inicios de agosto que si el ritmo actual de migración persiste, hasta 400.000 personas podrían cruzar la brecha antes de que termine el año.
Y es que MSF reporta que los robos, agresiones y violencia sexual a manos de bandas criminales son solo algunos de los vejámenes a los que se tienen que enfrentar centenares de migrantes al asumir el viaje.
“No hay nada humanitario en seguir permitiendo esta situación”
La ruta es considerada como una de las más mortíferas del mundo. Las cifras de cruces superan el promedio diario de 700 migrantes en 2022, lo que evidencia la necesidad de una acción inmediata, según las organizaciones humanitarias que trabajan en la zona.