AMLO busca sustituir el fentanilo con fines médicos en México y prohibir su importación al país
El fentanilo es un analgésico opioide sintético utilizado para tratar el dolor agudo y crónico. Sin embargo, también es una droga altamente adictiva y puede causar sobredosis y muerte.
En los últimos años, el fentanilo se ha convertido en una de las drogas más letales en Estados Unidos y México, donde se ha detectado su entrada al país de manera ilegal y su uso inapropiado en la práctica médica.
Por esta razón, el presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha propuesto la sustitución del fentanilo por otros analgésicos en la práctica médica en el país, y ha solicitado el análisis de esta posibilidad a médicos y científicos mexicanos. Si esta propuesta prospera, el presidente también pedirá que se implemente en Estados Unidos.
Esta propuesta surge como parte de los esfuerzos del gobierno mexicano para combatir el tráfico ilegal de drogas y prevenir el abuso de sustancias en el país. Según el presidente López Obrador, se busca encontrar alternativas seguras y efectivas para el manejo del dolor, que no representen un riesgo para la salud pública y que no sean objeto de tráfico ilegal.
En la conferencia de prensa matutina, el presidente también hizo hincapié en la importancia de mantener el control sobre la importación de sustancias medicinales y combatir la entrada ilegal de drogas a México. En este sentido, afirmó que el compromiso del gobierno es seguir combatiendo el tráfico ilegal y el contrabando de drogas, pero sin afectar el acceso de los pacientes a tratamientos seguros y efectivos.
La propuesta del presidente López Obrador ha sido recibida con interés por parte de la comunidad médica y científica en México. Aunque el fentanilo es un analgésico muy potente, también es una droga peligrosa y altamente adictiva, por lo que encontrar alternativas seguras y efectivas podría ser un gran avance en la lucha contra la adicción y la sobredosis de drogas en el país.
Sin embargo, también se han planteado preocupaciones sobre la disponibilidad de otros analgésicos en el mercado y la necesidad de garantizar que los pacientes tengan acceso a tratamientos adecuados para el manejo del dolor. Por esta razón, la propuesta del presidente López Obrador deberá ser analizada cuidadosamente por los expertos en la materia antes de ser implementada.