Capitalismo real o Socialismo

Desde el comienzo del sexenio del Lic. Andrés Manuel diferentes medios de comunicación se han encargado de describir su gobierno como uno populista y que incluso nos llevaría al socialismo, pero ¿realmente seguimos preceptos socialistas?, únicamente por tener relación con países como Venezuela, Cuba o Nicaragua entre otros.

Pienso que las políticas de AMLO van enfocadas a una transformación dentro del sistema capitalista mexicano y darle un verdadero orden para competir contra grandes naciones neoliberales en lugar de parecernos más a Venezuela o Cuba ingresando a la gran cadena mundial de suministros únicamente como maquilador o exportador de productos del sector primario.

Y se preguntarán ¿cómo es posible?; Los medios de comunicación lo bombardean a cada momento de populista y socialista, pero analizando sus acciones y “caprichos”, como la construcción del tren maya que está claro traería daños a la ecología, pero un gran nodo turístico para el mundo fomentando la construcción de infraestructura y la fabricación de trenes aumentando el interés de privados por invertir en esa nueva zona.

Por otro lado, la fuerte fiscalización que propone a todos los contribuyentes y evitar el trabajo informal dentro de la industria a través de la eliminación del outsourcing convirtiéndolo en trabajo especializado dándole así solidez a una fuerza de trabajo existente.

Esta última enfocada para sustentar una estrategia de repartir dinero a grupos vulnerables como ancianos o madres solteras además de apoyar a jóvenes estudiando o saliendo de la universidad, basado en varias teorías enfocadas a la eliminación de la pobreza manteniendo un cierto statu quo posrevolución sin afectar en la creación de la riqueza y su repartición.

En grandes rasgos estos argumentos nos hacen pensar que las decisiones propuestas por el presidente buscan transformar al país hacia un “mejor” capitalismo sin compadrazgos, aumentando a los “poderosos” del país con nuevos nombres y empresas, propiciando una competencia real entre particulares, criticando a los poderes Legislativo y Judicial que están subsumidos ante un poder económico algunas veces controlado por empresas extranjeras como la industria automotriz.

Es importante comprender la verdadera naturaleza de estos cambios para entender la transformación que se busca a través de la 4T.