Opinión

Datos históricos para no olvidar: Niccolo Paganini, el violinista del diablo

25 abril, 2023 7:06 pm
Gabriela Hernández

“No soy guapo, pero cuando las mujeres me

escuchan tocar, vienen arrastrándose a mis pies”.

Niccolo Paganini.

 

Niccolo Paganini fue un compositor italiano. Es considerado uno de los arquetipos del virtuosismo del violín y uno de los máximos representantes del movimiento instrumental del Romanticismo. Contribuyó con sus aportaciones al desarrollo de la “técnica moderna del violín”.

Cuando apareció Niccolo Paganini con sus dotes interpretativas que impresionaron a personajes como Franz Schubert y Gioacchino Rossini, y que incluso inspiró a Franz Liszt a tratar de emular sus logros en el piano, tomó al mundo de la música con sorpresa y sobrecogimiento. Y es que su virtuosismo, aunado a su apariencia algo tétrica y cadavérica, hizo que se pensara que Lucifer podría estar detrás de su talento con el instrumento que se considera como el consorte del diablo. Así de impresionante era el talento del italiano, que se aludía a algo sobrenatural para explicar su maestría en el violín.

Los rumores y las especulaciones persiguieron a Paganini durante toda su vida. Se decía que su madre, Teresa, había hecho un trato con el diablo, en el que le daba su alma a cambio de una carrera exitosa para su hijo. Otro rumor era que Niccolo, todo un mujeriego, había matado a una mujer y encerrado su alma en su violín. Paganini siempre iba vestido de negro a sus conciertos, en los cuales sus movimientos, el tono del instrumento y toda su actuación, parecían garantizar que en el rumor había un gran porcentaje de verdad.

Sin embargo, ¿quién fue en verdad este virtuoso?

Paganini nació en Génova, Italia, el 27 de octubre de 1782. Su padre, Antonio, le enseñó a tocar la mandolina a los cinco años, y el violín, a los siete. Como sucede con los niños prodigio, el talento del pequeño Niccolo fue rápidamente reconocido y se dedicó de lleno al estudio del violín. Cuando tenía dieciocho años, Paganini ya era famoso en Parma y Génova, y poco tiempo después, se hizo de un nombre por toda Europa.

En 1801 compuso más de veinte obras en las que combina la guitarra con otros instrumentos. De 1805 a 1813 fue director musical en la corte de Maria Anna Elisa Bacciocchi, princesa de Lucca y Piombino y hermana de Napoleón.

En 1813 abandonó Lucca, Italia. En 1828 tocó en Viena, donde el emperador Francisco II lo nombró “Virtuoso di camera”. En 1831 viajó a Londres. Y en París conoció al pianista y compositor húngaro Franz Liszt, quien fascinado por su técnica, desarrolló un correlato pianístico inspirado en lo que Paganini había hecho con el violín.

La técnica de Paganini asombraba tanto al público de la época que llegaron a pensar que existía algún influjo diabólico sobre él, porque a su vez, su apariencia se notaba algo extraña, y sus adelantos musicales eran una verdadera obra de arte. Se decía que en la mayoría de sus apuntes aparecía una nota extraña la cual decía “nota 13”. Es por ello que de inmediato se le asoció con Lucifer y fue conocido como “el violinista del diablo”.

Sus obras incluyen 24 caprichos para violín (1802-1817), seis conciertos y varias sonatas. Además, creó numerosas obras en las que involucraba de alguna manera a la guitarra.

Lamentablemente, con el paso del tiempo, su salud se fue deteriorando a causa de una tuberculosis diagnosticada en 1819. En 1834 y 1840 padeció dos fuertes episodios de hemoptisis. Y durante el avance de su enfermedad, que pasó de sus pulmones a la laringe, Paganini fue perdiendo la voz poco a poco hasta llegar al punto de quedarse completamente mudo. Además, el músico se medicaba con mercurio para tratar la sífilis que también padecía.

El 27 de mayo de 1840, Paganini falleció a los 58 años de edad en Niza, Francia. Y aunque nunca se pudo corroborar la historia de su cercanía diabólica, esta situación intervino a la hora de su sepultura. Paganini, en su lecho de muerte, rechazó los rezos de un sacerdote, por lo que el obispo de Niza negó su entierro religioso, aunque algunos dicen que este le fue negado más por su reputación de masón que por su asociación con el diablo. Su cuerpo fue embalsamado y almacenado en el sótano de la casa donde había fallecido. Finalmente, el cuerpo de Paganini fue enterrado en el cementerio de Parma en 1896.

Tuvo cinco violines: dos Stradivarius, dos Amati y un Guarnerius, el cual, cabe resaltar, era su favorito y fue fabricado por Giuseppe Guarneri en Cremona, Italia. Actualmente, es conservado en el Museo de Génova.

Sabías que…

Probablemente Paganini sufría del Síndrome de Marfan. Sus dedos eran muy largos, sus manos medían cuarenta y cinco centímetros, y era capaz de mover y torcer su muñeca en todas las direcciones.





Relacionados

Back to top button