Se acaba el agua

Mientras en el actual proceso electoral, los candidatos siguen planeando campañas negras, enfocándose a la guerra sucia y continúan sin presentar propuestas sólidas que permitan resolver los verdaderos problemas de la sociedad, el agua potable se acaba e incluso la población de algunos municipios ha comenzado a desesperarse.

No vamos lejos, este lunes cansados de no recibir ni gota de agua durante meses, vecinos de los fraccionamientos ubicados en el municipio conurbado de Cuautlancingo decidieron bloquear el Periférico Ecológico a la altura de Cuatro Caminos y alzar la voz para lograr que el SOSAPAC haga su trabajo y garantice el suministro que muchos incluso ya pagaron, sin embargo la ineptitud de los funcionarios que se encargan del organismo los obligaron a cerrar la importante vialidad, pues lejos de solucionar el asunto, les pusieron más trabas.

La semana pasada, sucedió algo parecido, nuevamente la falta de agua potable obligó a los habitantes de las comunidades cercanas a Coronango a cerrar la autopista México-Puebla y exigir que las autoridades ya no permitan que las empresas ubicadas en la zona, como transportes “Castores” sigan cavando más pozos, pues aseguran que por una módica cantidad compran a los funcionarios del agua potable y estos se hacen de la vista gorda, sin importar que el problema también les afecte a ellos.

Pero esta problemática no es exclusiva de la zona metropolitana, en la capital poblana viven familias que desde hace años no tienen agua potable y cada semana compran de una a dos pipas para resolver la crítica situación; cuando tengan oportunidad vayan a San Pablo Xochimehuacan o San Miguel Canoa, por ejemplo y pregúntenle a la gente si tiene agua, la respuesta será la misma NO, NO, NO.

Ante este panorama, no solo urge que los servidores públicos actuales tomen cartas en el asunto, los ciudadanos también quieren escuchar que proyectos tienen quienes ahora buscan ser diputados (as), presidentes (as) municipales o gobernadores para atender el grave desabasto de agua potable que existe en Puebla y sobre todo que socialicen planes de solución reales y no ocurrencias populistas.

Pónganse las pilas.