Se nos fue el 2023

Agoniza el 2023.

Dicen y con sobrada razón, que cada quien habla según le fue.

Y tienen razón.

Unos suman y otros restan.

A la mesa de año nuevo lamentablemente no llegan todos los que levantaron sus copas y extendieron los brazos para desear un feliz año 12 meses atrás.

Muchos se nos adelantaron y siguieron el ciclo de la vida.

Dimos cuenta de los decesos de muchas  personas,  Armando García Pedroche, unos días antes notificábamos la partida de Julián Abed Cesín, de Carlos Figueroa, de la reportera Cristina Pacheco, Valentina Glokner, Aurora Valle, y de muchos más que llenaron las funerarias de acuerdo a sus costumbres y tradiciones, mientras otros más dan la batalla a padecimientos mortales.

Así el acontecer del 2023, año con dones y deslices, trampas y oportunidades.

En este espacio hemos tenido la oportunidad de buscar y encontrar las noticias que prestigian, que dan orgullo, que engrandecen.

No es fácil cuando lo que vende son los alcances de lo malo, lo desastroso, la violencia, la polarización, la confrontación.

Seguiremos buscando lo mejor, lo que engrandece, lo que da orgullo, lo que dignifica, como hoy entre el espíritu navideño y las bajas temperaturas que han encerrado a muchas familias en un reencuentro al calor de una mesa y pese a la trampa de los celulares que alejan a los cercanos y acercan a los lejanos.

Lo invito a que el próximo año me lo comparta para reproducirlo en este espacio con el firme propósito de seguir hablando de lo bueno que hacemos que ocurra.

Muchas gracias por dedicarle unos minutos a  este espacio y conservemos la ilusión de un año nuevo cargado de cosas buenas, con mucha salud y toda la  disposición a  hacer mejor las cosas.

¡Feliz año!

Gracias al 2023 que hoy despedimos.