Taxis autónomos causan polémica en San Francisco
Redacción Tribuna
En la oscuridad de la ciudad de San Francisco, un taxi sin conductor frena mientras figuras enmascaradas lo rodean como un animal acosado. Uno de los hombres coloca un cono en el capó: desconcertado, el coche autónomo enciende las luces de emergencia y se detiene en medio del carril.
Esta semana, este curioso incidente se ha repetido decenas de veces en la capital estadounidense de la tecnología. Un grupo de activistas se divierte inhabilitando taxis robot por la noche para protestar contra su proliferación, una fuente de fricciones entre el estado de California (oeste) y concejales locales.
“Creemos que todos los autos son malos, no importa quién o qué los conduzca”, declara a la AFP Alex (nombre ficticio), un idealista del colectivo Safe Street Rebel, radicalmente pro-peatón y pro-ciclistas.
Para él, este vehículo futurista “no es un nuevo modo de transporte revolucionario”, sino que “otra forma de establecer el dominio del automóvil” en la sociedad moderna.
Con unos sencillos conos como los usados en la construcción, el grupo consigue inmovilizar varios minutos los taxis robot de Waymo y Cruise, las dos empresas autorizadas a operar en San Francisco, hasta la intervención de un técnico.
Su acción acumula millones de visualizaciones en las redes sociales y despierta polémica, justo en momentos en que California estudia permitir que estas empresas ofrezcan un servicio pago en la ciudad las 24 horas del día.
La Comisión de Servicios Públicos de California, responsable de la supervisión de los vehículos autónomos, pronto podría permitir que Waymo y Cruise amplíen sus servicios. Entonces funcionarían como las aplicaciones de Uber o Lyft, pero sin conductores al volante.
-AFP