Trump discípulo de Edgward Bernays

“La manipulación consciente e

inteligente  de las hábitos organizados y

las opiniones de las masas es un

elemento importante de la sociedad

democrática. … quienes manipulan este

mecanismo  invisible de la sociedad

constituyen un gobierno invisible…”

Edward Bernays (1891-1995)

“Propaganda” (1928)

La primera pregunta que le deberíamos de formular en una entrevista al Señor Trump, en caso de que existiera esa muy, pero muy remota posibilidad es; si él ha leído, se ha instruido, ha estudiado, o bien, la han sugerido,sus asesores y consultores, seguir un libro pequeñito escrito en el año de 1928, en el siglo XX, en Estados Unidos de América, es decir, está a punto de cumplir cien años que se editó, previo a la gran crisis económica de 1929, pero posterior a la primera guerra mundial, escrito a la puerta del nazismo, es más se ha sostenido por los historiadores que ese libro era el libro de cabecera de Gobbels, el ministro de propaganda del gobierno de Alemania comandado por el Partido Nacional Socialista.

Este libro de 1928, titulado: “Propaganda”, fue escrito por un licenciado en agronomía, periodista de ocupación, sobrino de Sigmund Freud, que a decir del pensador norteamericano Noam Chomsky, su primer gran éxito en la década de los 20 del siglo pasado, fue conseguir que con sus técnicas las mujeres empezaran a fumar, el autor: Edgard Bernays, es de quien se debería de hacer la pregunta al actual presidente de los Estados Unidos de América, y de paso, a muchos de los políticos de la actualidad, desde luego, para los políticos de América Latina, lo primero que van a responder es que no lo conocen, pero si conocen la importancia que tiene la propaganda para un gobierno y esa es parte de las experiencias que mostró en aquel pequeño libro de 1928 el autor.

Cita Edgard Beynards: “Quienes manipulan este mecanismo invisible de la sociedad constituyen un gobierno invisible…En gran parte nos gobiernan, conforman nuestras mentes, configuran nuestros gustos y sugieren nuestras ideas hombres de los que nunca hemos oído hablar.”

En ese libro, se hace mención de dos puntos muy importantes, el primero que atrás de los gobernantes, hay un gobierno silencioso, alguien que no se ve, y esa sería la pregunta, ¿Quién está atrás del gobierno actual de Estados Unidos de América?, porque siguiendo ese pequeño libro, alguien es el que está en la palestra y otros, pocos, desde luego, son los que están atrás de ella, a lo que denominaba Bernays como “el gobierno silencioso”.

Basta con record que en México, en el gobierno del presidente Carlos Salinas de Gortari, se hacía mención, como una especie de leyenda urbana, que quien en realidad gobernaba era Joseph Córdoba Montoya, y que era propiamente, el que dictaba las directrices y las políticas públicas a seguir, es decir una especia de gobierno silencioso mexicano.

En la actualidad Jordi Pigem, filósofo español, hace mención que pareciera que el error del Partido Nacional Socialista de Alemania de 1933, es que no hubo gobierno silencioso y que, eran los propios protagonistas de ese desastre mundial, los mismos titulares de los cargos públicos, como era el caso de aquel ministro de propaganda de ese gobierno desde 1933 a 1945.

Leyendo ese libro se explica por qué en ese gobierno,que provocó la segunda guerra mundial, se contaba con un ministro de propaganda, es decir, lo que sería un secretario para la estructura mexicana, a ese nivel de importancia fue la propaganda en esos tiempos.

Indudablemente que hoy, ya no se hace mención, ni uso de ese concepto de propaganda, pues actualmente se ve como algo tendencioso, maligno, etc., por ello es que, si bien a partir de esta serie de acontecimientos de hace cien años, se ha dado la importancia a la propaganda y, a los funcionarios que se encargan de esa actividad, se les denomina de otra forma, algo así como: “comunicación social”, por ejemplo, que es un pleonasmo, pues la comunicación es siempre social, en el sentido lisa y llano del lenguaje.

Para el autor del libro “Propaganda”, sostenía que, para la actividad y la explotación de la propaganda, se necesita de una profesión que es: “Relaciones públicas”, incluso, se considera el padre de esa profesión a este olvidado autor.

En fin, que los aranceles llegan y se van, que regresan, que se vuelven a aumentar y a quitar, y que ahora los migrantes ilegales en Estados Unidos de América y se van a deportar, que mejor se van a la isla de Cuba a Guantánamo, que se van a criminalizar, etc., estos vaivenes no son otra cosa que, el uso incesante de la propaganda, por eso es que bien cabe aquella pregunta al presidente Turump, y de paso, instruir de la existencia de ese librito a nuestros políticos nacionales, que evidentemente lo conocen desde su practica diaria, pero seguramente no en el texto. (Web: parmenasradio.org)