Un Mundial bienal sería “perjudicial” para el fútbol femenino, advierten UEFA y ECA
Celebrar un Mundial de fútbol cada dos años, tal como estudia la FIFA, sería “perjudicial” para el fútbol femenino, aseguraron la UEFA, la Asociación Europea de Clubes (ECA) y varias federaciones en un comunicado común publicado este lunes.
El proyecto de la FIFA “de organizar cada dos años un Mundial masculino y femenino”, en lugar de cada cuatro años como hasta ahora, “tendrá repercusiones deportivas, económicas y sociales profundamente perjudiciales, que alterarán fundamentalmente el curso y el desarrollo del fútbol femenino”, advirtieron los firmantes del texto.
Este comunicado común es el último episodio de la batalla que libran desde septiembre la FIFA y sus aliados en la idea de celebrar una Copa del Mundo bienal, con la promesa de aumentar los ingresos, con la UEFA, su homóloga en Sudamérica (Conmebol), así como la agrupación de Ligas Mundiales y los representantes de aficionados y jugadores.
La Federación Francesa de Fútbol, no obstante, rompió la unanimidad del fútbol europeo, contrario al proyecto, cuando su presidente Noël Le Graët aseguró en una entrevista al diario L’Equipe “no oponerse a una Copa del Mundo cada dos años”.
De hecho, la FFF no ha firmado el texto, como tampoco la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), a diferencia de las federaciones inglesa, alemana, italiana, danesa, finlandesa, sueca, suiza y holandesa.
Los firmantes del texto deploran que el proyecto añada “más congestión al calendario” del fútbol femenino, “lo que conlleva un mayor riesgo de lesiones físicas e impactos en la salud mental de las jugadoras de alto nivel debido a la mayor concentración de partidos para las vías de clasificación con períodos de preparación limitados y, la mayor carga impuesta a los jugadores durante las condiciones de las fases finales más frecuentes”.
Más específicamente, estiman que el fútbol femenino perdería “viabilidad financiera” por la “saturación de los mercados”, en un momento en el que las fases finales de los grandes torneos del fútbol femenino se disputan en los años impares, para no hacerlos coincidir con los grandes eventos masculinos en años pares.
Por la misma razón, la UEFA y sus aliados se muestran preocupados por el hecho e que la FIFA pueda “perturbar la cultura global y de rápida evolución de los aficionados al fútbol femenino, que está despegando, pero que corre el riesgo de verse afectada por la mejora de los eventos deportivos establecidos de la competición, lo que desviará el interés y la inversión de los aficionados en el fútbol femenino”.
Finalmente, los firmantes temen un efecto negativo en el proceso de “profesionalización y la inversión en las ligas nacionales, y por tanto la ambición de crear un trabajo significativo a tiempo completo para las jugadoras y estructuras que ofrezcan un entorno de élite”.