Actitudes machistas multiplican riesgo de sufrir accidentes viales
Redacción.- La agresividad al volante no solo demuestra una falta de civismo, sino que tiene consecuencias negativas y peligrosas para el resto de conductores, concluye el estudio Influencia de la agresividad en los accidentes de tráfico.
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La investigación, realizada por la Fundación Línea Directa y el Instituto Universitario de Investigación de Tránsito y Seguridad Vial de la Universidad de Valencia (INTRAS), explica que “mantener actitudes provocadoras al conducir multiplica por 10 el riesgo de sufrir un accidente con víctimas y por 30 el riesgo de sufrir un siniestro con heridos graves”.
Entre esas “actitudes provocadoras” —normalizadas y comunes entre los automovilistas— se encuentran tocar el claxon o insultar a otros conductores, ignorar las señales de tránsito, bloquear el paso o adelantarse a otro auto, e incluso retar a otro conductor a golpes.
Aunque las causas de esta agresividad son diversas, los especialistas la relacionan estrechamente con el machismo. En España, según el estudio antes mencionado, el automovilista promedio —hombre de 32 años que circula por vías urbanas— reacciona con mucha más agresividad contra los conductores principiantes y las mujeres.
Es decir, contra dos grupos que, según su lógica, no tienen la experiencia necesaria para transitar en este espacio masculinizado —como lo denomina la investigación La seguridad vial desde un enfoque de género—, en el cual lo que importa es la velocidad y el poder sobre los demás conductores.
Hay una cuestión cultural presente: es el machismo llevado a las calles (lo) que aumenta el riesgo de ocurrencia de accidentes”, señala el especialista en Salud Pública, Miguel Orozco, en entrevista para El Nuevo Diario.
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La directora del Centro de Prevención de la Violencia (Ceprev) Mónica Zalaquett explica al mismo medio que “al hombre se le enseña el comportamiento guerrero (arrebatado, violento) como rasgo de masculinidad, y lo adopta en muchos ámbitos de la vida, como cuando va manejando”.
Manejar se ha vuelto un acto agresivo, muchos hombres toman el volante enojados, bajo los efectos del alcohol o manejan agresivamente para medir fuerzas con otros hombres. No hay cortesía, sino agresividad”, apunta Zalaquett.
De acuerdo con una investigación de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la esperanza de vida de los hombres en la región de las Américas es 5.8 años inferior a la de las mujeres. Una de las principales causas de este indicador negativo son los siniestros viales.