¿Quién rescata las autopistas de México?

“El campesinado, el desclasado,

el hambriento, es el explotado que

descubre más pronto que sólo vale la

violencia. Para él no hay

transacciones, no hay

posibilidad de arreglos.”

José Pablo Feinmann

Desafortunadamente no hay semana que en las noticias no se informe que se tomaron tal o cual autopista en alguna parte del territorio nacional, ya sea por inconformes que no les han pagado sus indemnizaciones por expropiaciones, o bien, por desplazados, los migrantes, algún sindicato de los que aun aparecen por allí vivos, es más, hasta quienes han sido defraudados por una caja de ahorro o de una simple tanda de la colonia, todo mundo sabe que si toma una carretera, alguien les hará caso.

Hace 30 años, noticias de esa magnitud eran de ocho columnas, en primer lugar, ¿cómo era posible que se tomara una autopista por manifestantes?, ¿quien tuvo la valentía de tomar una autopista?, hoy es algo tan común y cotidiano que es lo mismo que se tome un viernes o todo un fin de semana, en lo que llega alguna autoridad a entrevistarse con los inconformes y manifestantes, pueden pasar horas o días, en tanto las autopistas bloqueadas, en un país en donde la única circulación de las mercancías es por vía terrestre en autopistas, ya que no hay otra alternativa más, no contamos con puertos para hacer llegar más rápido las mercancías, menos aun contamos con aeropuertos regionales, mucho menos con servicio de tren, por lo cual la única alternativa son las carreteras y si estas se encuentran en pésimas condiciones, otras como es el caso emblemático de la autopista de México a Puebla, que nunca, pero nunca ha quedado terminada, siempre está en reparación, por mínimo que sea, pero siempre hay un tramo en reparación, pintando, barriendo, o por lo menos, estorbando, pero aparentemente haciendo algo, y si a eso le aumentamos la delincuencia organizada en la autopista, y sin lugar a duda los bloqueos, es suficiente para sostener que estamos ante la presencia de un problema muy grave que paulatinamente se ha minimizado en los medios de comunicación, es más ha pasado a ser noticia de poca relevancia, en ocasiones ya ni se menciona, o en el caso de mencionarse es algo tan rutinario que pasa como  un simple comunicado.

Ya es suficiente con el problema en las autopistas respecto al crimen organizado, sobre la mala calidad de las mismas, el exceso de mantenimiento en otras, como es el caso de la autopista de México-Puebla, pero ahora aumentar los permanentes bloqueos, es verdaderamente lamentable para el transporte en general, para las personas que requieren transportarse, pero sobre todo los costos que representa que la mercancía se quede parada en un kilómetro de cualquier autopista, sin tener hora y fecha para continuar, con el riesgo que representa tener la mercancía a la buena de la fortuna, por lo cual, se debe de considerar resolver ese problema, ya que se ha vuelto la práctica más común en el país, es más hasta una alternativa de solución de los problemas, cuando estamos ante la presencia de una serie de medios de defensa legales que no avanzan, que no resuelven sobre el fondo del asunto, sentencias que solamente dan y dan mas vueltas a los asuntos, por ello es que, resulta necesario que se tome en consideración que se ha convertido esos bloqueos en una alternativa para la solución de los problemas, y de cualquier problema, como hace unos meses sucedió que, los trabajadores de una empresa bloquearon la autopista atendiendo a que, a esa empresa, su cliente no les había pagado, por ello exigían que ese cliente, una empresa privada, les pagara sus adeudos, lo cual raya en algo ya incontrolable.

Sin embargo, esta serie de bloqueos, paros, manifestaciones en las carreteras, toma de casetas, pedir a cada vehículo una cooperación, no es otra cosa más que la prueba fehaciente que el sistema no funciona y cada día es más recurrente. Resulta que los órganos jurisdiccionales en donde se encuentran sus asuntos no se resuelven o se resuelven en beneficio de otros, que las instancias administrativas no pudieron resolver los problemas  desde el principio, y por ello, llegan a instancias judiciales de indeterminada fecha de finalización, que muchas de las ocasiones esos bloqueos se resuelven con simples promesas de reuniones, manifiestos, peticiones, etc., pero que no resuelven nada del fondo del asunto. Anteriormente, las manifestaciones eran en los zócalos, afuera de las oficinas de las autoridades, pero ahora es en autopistas, con el afán de dañar a terceros, y eso es lo que implica que con estas acciones se estén cometiendo delitos en perjuicio de terceros, de simples ciudadanos de a pie que se ven afectados por esta serie de medidas, pero que resulta que el 99.99% de estos afectados y victimas de esos delitos, no hacen nada más que circular cuando ya está libre el paso, por eso es que se siguen cometiendo esa serie de manifestaciones, porque pareciera que no hay Estado de derecho que permita resolver los problemas de una forma más civilizada que bloqueando las carreteras. Por eso: ¿quien rescata las autopistas de México? (Web: parmenasradio.org)